Santa Bárbara. José Arnold Avelar, gobernador político de este departamento, considera que cualquiera que sea la opción final que el Gobierno adopte para la represa, sea que tenga embalse, sea que no, o que tenga todos los componentes: control de inundaciones, riego y generación hidroeléctrica, provocará un fuerte impacto entre los ciudadanos pateplumas.

“Con el espejo de agua que esta represa causaría habrá desplazamiento de algunas familias y comunidades, pero es un tema que hay que evaluarlo desde el costo-beneficio”.

El funcionario explicó que les han planteado tres opciones de represas. Una que genere energía, para lo cual se formaría un espejo de agua; otra solo para control de inundaciones que sería la rompepicos que se maneja como la oficial y una tercera híbrida, con un embalse más pequeño para temas de riego y agua potable”.

Considera que lo que cueste cualquiera de las represas que se elija, saldrá más barata que las pérdidas que causan las tormentas cada invierno.

“Las pérdidas que dejaron las tormentas Eta y Iota se cuantifican en billones. Además de eso la pérdida de vidas humanas, y de inversiones tanto públicas como privadas. Este es un tema que definitivamente busca la prevención”, precisó.

El gobernador adelantó que les informaron que muchos de los estudios que se fueron realizando a lo largo de los más de 30 años que lleva en planes este proyecto estarán siendo actualizados por personeros del gobierno.

También ve indispensable que comience cuanto antes la socialización del proyecto con las comunidades que van a ser afectadas y hacer la evaluación de los beneficios u afectaciones que se pudieran tener.

“Se nos informó que se ha estimado que se podrían destinar 40 millones de dólares para el tema de indemnizaciones y cubrir el impacto que el proyecto generaría en la zona”, afirmó el gobernador.