El Salvador: No hay visitas en las cárceles para los reos

Los familiares solo pueden mandar paquetes de alimentos en bolsas de plástico y deben pagar por los uniformes de los reos, pero no han logrado verlos en meses.

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Ante el aumento de la población penitenciaria, el Penalito fue habilitado para llevar a los capturados durante el régimen de El Salvador.

mar 21 de marzo de 2023

14 min. de lectura

EL SALVADOR

Un total de 11.25 dólares (casi 278 lempiras al cambio actual) cuesta el uniforme que visten los reos del penal La Esperanza, conocido como Mariona, en Sal Salvador, El Salvador.Pero esta vestimenta no la proporciona el Estado, lo compran los mismos reclusos.Así, cientos de madres se reúnen en las afueras de la cárcel para comprar la ropa y hasta ajustan el dinero para mandarles víveres a sus hijos.

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Los familiares de los privados de libertad no solo están obligados a comprar el uniforme blanco, sino que deben proporcionales alimentos y productos de higiene personal.

Por ello, las afueras del penal de Mariona se han convertido en un pequeño mercado que se formó para atender a los cientos de personas que desfilan por la zona para auxiliar a sus parientes recluidos, debido al aumento de la población carcelaria, producto del estado de excepción aprobado en marzo de 2022 por el Gobierno salvadoreño.

Alimentos

En uno de esos puestos de venta estaba Norma (nombre ficticio porque pidió discreción), quien con unos pocos dólares quería hacerle una bolsa de alimentos a su hijo.

Denuncias
  • > En los penales, los reos no tienen derecho a visitas y sus familias deben pagar por los uniformes, así como por productos de higiene.

“Deme el uniforme completo”, le dijo Norma a la vendedora, que pidió la talla de camiseta, “short” y unos “sapos”(chancletas). Todo color blanco.La camisa le cuesta 1.50 dólares, la licra tres, el boxer dos y los calcetines 0.75, le especificó la comerciante.

Luego de ver el dinero que andaba, doña Norma le dijo que le echara en la bolsa algunos alimentos y productos de limpieza personal.Con gran agilidad, la vendedora comenzó a sacar un paquete de galletas saladas y las metió en una bolsa, abrió un paquete de avena y otra de un suplemento alimenticio y las mezcló con azúcar.

$!Cada noche, en el centro de reclusión del Penalito son liberados algunos de los capturados, esperados muchas veces por parientes.

Los periodistas de LA PRENSA Premium que observaban la venta consultaron a la despachadora por qué los revolvía, ella, sin descuidar su trabajo, dijo que “es que los muchachos adentro estaban haciendo ‘chicha’ y los castigaron, ahora no se las dejan pasar”.

Hacer la bolsa con los víveres para los vendedores ya es una práctica rápida, y eso incluye sacar de los tubos la pasta dental y la crema para hongos y echarla en pequeñas bolsas de plástico e incluso cortar parte del plástico del mango del cepillo de dientes.

Para saber
  • > Listados. Cada noche afuera del Penalito, los familiares que tienen esperanza de que sus parientes salgan libres pasan meses de espera.
  • > Traslados. Después de que los reos son mantenidos en el Penalito son trasladados a otros centros, y los que son pandilleros al CCT.

En total, a doña Norma le salieron 38.35 dólares (947 lempiras).“Viajo una o dos veces al mes desde Sonsonate, solo me ajusta para comprarle un poco de comida, pues soy vendedora de tortillas y mi hijo de 17 años y mis hermanas colaboran un poco”, dijo la señora, quien luego caminó al portón de entrada del penal de Mariona con su paquete para ir a entregarlo.

“Mi hijo fue capturado en abril del año pasado y no lo hemos visto, lo único que me da esperanza es su niño recién nacido, que tiene su misma cara”, expresó con tristeza.

$!La cantidad de privados de libertad en los centros penales ha aumentado en El Salvador.

Otras mujeres que hicieron compras de paquetes más grandes indicaron a LA PRENSA Premium que hay quejas de que no entregan todos los productos a sus familiares encarcelados y por eso tratan de llevar un poco de todo en los paquetes.Esas denuncias han sido trasladadas, incluso, a organizaciones de Derechos Humanos.

Antes del régimen de excepción, según un informe de Human Rights Watch y de la organización Cristosal, en Mariona la población penitenciaria era de 7,600 reos, pero el año pasado se contabilizaban 33,000.Por ejemplo, en el penal de Izalco, la población penitenciaria pasó de 8,500 a 23,000 presidiarios.

El informe, publicado en diciembre de 2022, concluyó que se han cometido violaciones generalizadas de derechos humanos durante el régimen de excepción, incluidas detenciones arbitrarias masivas, torturas y otras formas de maltrato contra personas detenidas, muerte bajo custodia y procesos penales abusivos.

Penalito

La agonía de madres que tienen a sus hijos presos no termina, pues cuando tienen esperanzas de que serán liberados porque no han sido vinculados a pandillas, en las noches se apostan en las afueras de un recinto policial al que han llamado Penalito.

Ese nombre fue adquirido luego del régimen de excepción, pues a ese lugar son llevados en grandes cantidades los capturados y también son liberados.

$!Algunas cárceles ya sobrepasaron su capacitad de alojamiento.

Suyapa, otra de las mujeres que permanecía afuera del sitio, relató que su hijo fue capturado hace 9 meses y que pasa casi todas las noches en las afueras del Penalito esperando una buena noticia.

El hijo de Suyapa tiene una discapacidad mental, certificado con diagnóstico médico, pero no ha logrado que lo dejen en libertad. Incluso sus dictámenes están en el expediente judicial, asegura la madre.

$!En el Penalito no reciben sol y su comida es limitada, por lo que a veces miembros de iglesia llevan alimentos en las noches para los presidiarios.

Mientras el tiempo pasa, la señora se ha puesto a vender dulces para costear sus viajes a la capital salvadoreña y colabora con otras mujeres compartiéndoles los listados que cada noche sacan los policías.

En las afueras del Penalito hay movimiento todas las noches de capturados, otras veces de traslados a los penales de Mariona o Izalco y también de jóvenes que son liberados.Durante la noche cuando LA PRENSA Premium estuvo en el lugar había un total 280 hombres recluidos.

Fueron liberados seis , de los que dos ya habían cumplido sus condenas y los restantes cuatro fueron capturados el año pasado durante el régimen de excepción.“Váyanse rápido, rápido, que si no los van a volver a capturar”, les dijo una mujer a los familiares de uno de los recién liberados.

Esa misma persona relató que cuando no hay familiares que estén afuera para recibir a los liberados, los regresan a la celda común.El Penalito es un edificio donde improvisaron celdas para mantener a los presos y no hay áreas para recibir sol ni suficientes baños.

$!El Salvador: No hay visitas en las cárceles para los reos

Grupos de familiares de presos han hecho páginas en las redes sociales para difundir los nombres de los que cada día dejan en libertad.Miembros de iglesias llegan a dejar comida.

Luego de ser autorizados por los policías, ingresan al recinto a orar y cantar con los privados de libertad. Después de estar varios meses en el Penalito, algunos reos son llevados a Mariona. De comprobarse que son miembros de maras o pandillas, van directo al Centro de Confinamiento del Terrorismo, donde ya están recluidos 4,000 pandilleros.