Más 13,000 escuelas y colegios con paredes dañadas, techos colapsados y pisos destruidos

TEGUCIGALPA, HONDURAS. – A través de los años, Honduras ha arrastrado una situación crítica en infraestructura escolar. Un total de 13,186 centros educativos están en mal estado a nivel nacional, según el último informe emitido por la Dirección General de Construcciones Escolares y Bienes Inmuebles (Digecebi).

LA PRENSA Premium tuvo acceso al documento denominado Reconstrucción de Centros Educativos, con fecha de abril de 2023, que especifica que para la reparación de las escuelas en mención se necesita un presupuesto de 39,558 millones de lempiras.

El informe toma como indicadores el estado del mobiliario (que representa el 20% de las condiciones para generar un índice de calidad en cada centro), servicios básicos (5%), amenazas naturales (5%), sociales (5%), sistema hidrosanitario (25%) y la infraestructura del centro escolar (40%).

En total, se identificaron un total de 22,680 centros educativos que operan en 17,525 planteles (en un plantel puede funcionar más de una institución educativa, ya sea porque reúne más de dos construcciones diferentes -como jardín de niños y escuela- o porque en un mismo edificio operan dos instituciones en diferente jornada -matutina y vespertina-).

De los 17,525 planteles educativos, 14,188 estaban colapsados a la fecha del informe. No obstante, a la cifra se le restaría las 1,002 escuelas intervenidas por el gobierno en 2022, porque el número se reduce a 13,186.

Esas 1,002 intervenciones, durante el primer año de gobierno de la presidenta Xiomara Castro, corresponden a 95 proyectos desarrollados por parte de la Secretaría de Educación -la mayoría por la emergencia de las lluvias del 2022-, mientras que los otros 907 pertenecen a alcaldías y a cooperantes externos, siento estos últimos los faltantes en el portal de transparencia.

Sin embargo, todavía hay una enorme brecha para tener centros escolares en óptimas condiciones, pues queda una relación preocupante: 75% de los edificios escolares están colapsados, según el cálculo elaborado por LA PRENSA Premium.

Además, este panorama indica que durante la gestión de la mandataria y del ministro Daniel Sponda frente a la institución es imposible llegar a la brecha mencionada, por lo que serán proyectos que los próximos gobiernos deberán priorizar, según expertos.

Según el Plan Maestro de Infraestructura, el departamento con la situación precaria en el tema de infraestructura escolar es Gracias a Dios, pues apenas el 37.11% de las escuelas cuentan con las condiciones óptimas (paredes, estructura, cubierta de techo, ventanas, cielo falso, puertas y piso). El restante 62.89% están en mal estado.

Le siguen en el listado Olancho (con solo el 54.55% de los centros escolares con buena infraestructura) y Lempira (56.22%).

En contraste, las instituciones educativas de Ocotepeque son las mejor evaluadas en su infraestructura (alcanzan el 67.29%). Después sobresalen los departamentos de Valle (64.05%) y Cortés (63.46%).

Llama la atención que en ninguno de los 18 departamentos del territorio nacional se alcanza el 70% en infraestructura escolar.

Sobre la condición de servicios básicos en planteles educativos, la institución calificó con 54.58% el índice nacional, donde se evalúa la disponibilidad de agua potable, energía eléctrica y evacuación de aguas negras.

Por su parte, el mobiliario en los centros escolares del país tiene un índice de 63.59%, tomando en cuenta si se encuentra en condiciones óptimas para su uso. En este apartado, Gracias a Dios, Olancho y Yoro figuran una vez más en los primeros tres lugares con más daños.

“El tema de infraestructura educativa es de gobierno porque el ministro no es experto y lo colocan para que no se le ataque al gobierno. El ministro lo que tiene es una pequeña unidad que le dieron el tema de reparar y crear nuevos centros educativos”, consideró el académico Jonny Varela.

Según el experto en temas educativos, todavía se desconoce la estrategia de gobierno actual en temas educativos, así como el método para focalizar los centros con más necesidades a nivel nacional. “Muchas veces en los gobiernos se prioriza más por afinidad de que tiene mayor control sobre una secretaría de estado”, apuntó.

“Entonces el rol de Construcciones Escolares debe velar y garantizar que todas las construcciones cumplan con los estándares y debe presionar al gobierno para que le pueda reparar los centros educativos, pero el rol ha cambiado, creo que le dieron un rol más protagónico para que ellos se encarguen de todos los procesos de licitación, contratación y usted sabe a qué se presta todo esto”, aseveró.

Además, apunto que la infraestructura escolar no se trata solamente de la construcción, pues requiere del inmobiliario y condiciones adecuadas para que los niños puedan recibir clases.

Desde la Dirección de Construcciones Escolares de la Secretaría de Educación responsabilizan a las gestiones anteriores por los indicadores. “Hay antecedentes que son lo que permitieron el desastre que ahora tenemos. Hemos tenido abates, la magnitud es improcedente y hasta ahorita es que se ha hecho una intervención masiva en edificaciones de los 80 que estaban deterioradas”, Juan Carlos Coello, jefe de la unidad.

A su juicio, las acciones de la administración actual representan un gran avance. “Mire, yo soy el director, pero este tema lo he visto como un patriota. No pareciera, pero sí se ha hecho bastante”.

“Este tema necesita que toda la población se una, que todos los involucrados tengan que ver sean coordinados por la Secretaría de Educación”, exhortó la autoridad.