La misma noche del incendio, personas de otros lugares vieron el hecho como una oportunidad de conseguir ayuda despojando de esas cosas a las personas que de verdad lo necesitan porque perdieron todo.
Los días posteriores, los oportunistas se mezclaron con las familias damnificadas y recibieron parte de las donaciones que empresas, organizaciones y particulares se llevaron al lugar.
Esa es la razón principal para que los pobladores no quieran abandonar la calle y moverse a un albergue instalado en una escuela pública a unas cuantas cuadras arriba del lugar del hecho.
“Si nos movemos, nos invaden y nos quedamos sin el pedacito de tierra para vivir”, expreso Ulises Paz, afectado.
Para evitar que esta situación continúe, la Municipalidad levantó un censo oficial de las personas que fueron afectadas por el voraz incendio.
La alcaldía, mediante un comunicado, detalló que son 36 familias las que han sido afectadas directamente por el incendio, pues se efectuó una minuciosa depuración, para que solo los afectados fuesen los que verdaderamente reciban las ayudas y no otras personas.
De igual forma, cuadrillas de Desechos Sólidos, y Parques y Bulevares, desde tempranas horas, procedieron nuevamente a la limpieza del predio, evitando con ello insalubridad o algún tipo de problema de salud por acumulación de basura.
Juan José Leiva, jefe de la unidad de Salud Municipal, expresó que mientras estas personas estén durmiendo a la intemperie seguirán con problemas de salud. “Realizamos dos brigadas en ese lugar, en la primera que se ejecutó se atendió a unas 80 personas; en la segunda atendieron a unos 50 pobladores entre niños, adultos y jóvenes, que presentaban problemas respiratorios y en la piel”.
La gobernadora de Cortés, Wiladina Chiang, manifestó que hoy llevarán materiales de construcción para que las personas comiencen a reconstruir sus viviendas lo más pronto posible.
