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Preocupa instalación de una refinería en la Bahía de Trujillo

  • 07 septiembre 2016 /

Trujillo, Honduras.

El interés de una refinería en instalarse en la Bahía de Trujillo ha despertado la preocupación de la Iglesia Católica y otras organizaciones de este municipio, debido a los daños que se supone provocará esta industria a las reservas naturales y marinas que son los pilares del turismo que ofrece esta ciudad.

Una oficina administrativa de la empresa mercantil registrada como Castilla Refinería S.A de C.V. ya funciona en este municipio, lo que encendió las alarmas de la ciudadanía.

“Es una gran preocupación de la iglesia; vemos que hay información de una supuesta refinería que se quiere instalar en la Bahía de Trujillo”, dijo Hermenegildo Ramírez, párroco de la Iglesia Católica.

Según el sacerdote, de la poca información que se maneja, es que se trata “de un traslado de una refinería de El Progreso, Guatemala, hacia Castilla. Y la refinería no es la alternativa para salir del subdesarrollo de este municipio, con tantas riquezas naturales y ecológicas”, expresó.

El padre dijo desconocer si el Gobierno Central está informado sobre este tipo de proyectos, que es una plataforma industrial destinada a la refinación del petróleo.

Foto: La Prensa

En zona de Barranco Blanco construirán la refinería.
“De un lado -el Gobierno- está animando a la población a cuidar la riqueza natural que tenemos en el cerro Calentura y la laguna de Guaimoreto; pero sí está de alguna manera de acuerdo con este tipo de proyectos, vemos que hay una contradicción”.

El alcalde Antonio Laínez aseguró que a esta empresa solo se le ha extendido un permiso para la apertura de una oficina administrativa. “No tienen permiso ni siquiera para clavar una estaca en ningún terreno en el municipio”, aclaró.

Laínez indicó que la empresa hizo una solicitud para instalar una oficina que pudiera tener acceso a labores técnicas de investigación, batimetría, estudios de suelos para constatar la viabilidad e impacto de ambiente, “y esto no se lo permitimos como alcaldía”.

Se conoció que la empresa ha estado en pláticas con la comunidad étnica de Cristales y Río Negro para negociar la adquisición de sus tierras comunales en el sector de Barranco Blanco. “Hay que aclarar que el que aprueba estos proyectos es el pueblo, porque se tiene que someter a un cabildo abierto, si se diera”, recordó Laínez.

De instalarse una refinería, la imagen turística de Trujillo ante a las empresas de cruceros se vería afectada. “Qué pasará con el banco de las estrellas y del caracol bolabula que tenemos en la bahía y que son únicos en el mundo. Todas esas cosas hay que evaluarlas”, dijo el alcalde. Para este proyecto tienen identificadas 12 hectáreas de tierras cerca del Refugio de Vida Silvestre Laguna de Guaimoreto. LA PRENSA visitó las oficinas de Cristales y Río Negro y de la empresa Castilla Refinería para obtener su opinión sobre este tema, pero fue imposible.