Honduras en alerta ante amenaza de frente frío que dejará más lluvias

San Pedro Sula, Honduras.

A pesar de que las primeras alertas por lluvias en Honduras se activaron por la tormenta tropical Pilar, la atención se enfoca ahora en la amenaza de un frente frío, materializado en un área de nubes desorganizadas en el Atlántico. Este fenómeno climatológico se encuentra bajo escrutinio debido al peligro que representa para diversas regiones, principalmente para el occidente y Valle de Sula.

Según el monitoreo del Centro Nacional de Estudios Atmosféricos Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), se prevé que Pilar se acerque a las costas de El Salvador, pero una masa de aire frío la alejará de Centroamérica a partir del miércoles.

No obstante, la circulación de los vientos asociados a este sistema transportará humedad desde el océano Pacífico hacia el territorio nacional, con afectaciones principalmente en Choluteca, Valle, Santa Bárbara, La Paz, Comayagua, El Paraíso, y Francisco Morazán.

El meteorólogo hondureño Alberto López, en una declaración con LA PRENSA Premium, explicó que Pilar se alejará por completo a partir del miércoles en horas de la tarde o el jueves. “Pilar está causando una vaguada con lluvias y chubascos, pero su desplazamiento es hacia el Pacífico, no hay motivo de alarma, ya que con el paso de las horas se alejará aún más”, detalló el experto.

Para esta semana, más allá de la presencia de la tormenta Pilar, se contemplan dos escenarios en el radar. El menos probable, según el especialista Alberto López, es que se forme un ciclón en el Atlántico, que podría ingresar por el norte de Nicaragua y avanzar por todo su territorio, rozando las fronteras hondureñas. Si este evento se materializa, las áreas más afectadas serían Gracias a Dios, el sur de Olancho, Choluteca, Valle, La Paz y el sur de Francisco Morazán.

Lo que parece más probable, según el pronosticador, es que a partir del miércoles por la noche ingrese un frente frío que afectará principalmente el sur de Nicaragua. Las bandas nubosas llegarán inicialmente a El Paraíso, Choluteca y Valle, pero tendrán un impacto más significativo en el occidente y valle de Sula, incluso con posibles inundaciones similares a las que ocurrieron a mediados de octubre pasado en Islas de la Bahía, Colón y Atlántida.

Las áreas que enfrentarían mayores daños en caso de que se forme un fenómeno en el Atlántico son Roatán, en Islas de la Bahía; los municipios de Cortés como Puerto Cortés y Omoa, así como algunos de Santa Bárbara, Yoro y Atlántida. En el resto de los departamentos se esperan solo lluvias leves y un descenso de las temperaturas.

Karez Cruz, coordinadora del Comité de Emergencia Municipal (Codem) en el valle de Sula, manifestó que monitorean desde el domingo por la noche y todos los líderes comunitarios de zonas vulnerables están al tanto de la situación. Están preparados con alojamientos temporales y albergues definidos para las comunidades que puedan verse afectadas.

”De momento activamos nuestro centro de operaciones de emergencia y en cualquier instante podrán iniciar las evacuaciones preventivas de ser necesario, aún no obligatorias. La vulnerabilidad del Valle de Sula es alta, se han hecho algunos trabajos, pero nunca es suficiente”, reconoció Cruz.

Ante las condiciones climáticas se instó a la población a tomar precauciones extremas en las áreas debido a la posibilidad de lluvias, vientos y altos oleajes, incluyendo las actividades de navegación marítima, y a seguir atentamente las recomendaciones emitidas por las autoridades.

El Cuerpo de Bomberos en San Pedro Sula se mantiene alerta y observando el avance del clima, así como los niveles de los ríos, para proporcionar asistencia en casos de emergencia en las regiones del norte, occidente y atlántico. Desde la institución se instó a las personas que viven en las riberas de los ríos o zonas vulnerables a evacuar si lo consideran necesario, incluso antes de que sea obligatorio.

“Estamos atentos a cualquier evento adverso, tenemos listos el personal técnico tanto en el área acuática como terrestre para dar respuesta a situaciones. Le pedimos a las personas que viven en las riveras de los ríos o zonas vulnerables, que si ven necesario evacuar antes, lo hagan”, especificó Sergio Amador, portavoz de los Bomberos en la zona norte.

Amador señaló que los niveles de los ríos se mantienen estables, pero son conscientes de que pueden cambiar rápidamente si las lluvias se intensifican. En San Pedro Sula, las partes bajas son las más vulnerables a inundaciones, incluyendo sectores como San Pedro Sula, Chamelecón, Chotepe, La Puerta, Paz Barahona, Juan Lindo, Colombia, río Blanco y paso El Zapotal.

LA PRENSA Premium realizó un recorrido en municipios como La Lima y El Progreso, zonas altamente inundables, donde la actividad comercial continuaba con normalidad el lunes mientras los pronósticos y las noticias anunciaban la llegada de intensas lluvias para este martes.

Durante el recorrido se pudo observar que el nivel del río Chamelecón en La Lima se encontraba reducido, y el río Ulúa a la altura de la colonia Policarpo Paz García y en el puente Plateado, en El Progreso, mostraba un leve aumento, pero nada significativo; sin embargo, los bordos en estos lugares y en otros municipios del valle están hechos de arena compacta y podrían ser insuficientes para contener la presión del agua si las lluvias aumentan el caudal de los ríos.

Los residentes de estas áreas se mantienen alertas y listos para evacuar si es necesario, conscientes de la importancia de la precaución. Gumercindo Álvarez, quien transitaba sobre su bicicleta mientras observaba el nivel del río desde el puente, comentó que durante los últimos días han estado al tanto de las noticias sobre las lluvias, pero como vecinos se mantienen en calma.

“Sí ha llovido estos días, pero ha sido poco, en todo caso, estamos listos para evacuar de ser necesario, porque si no, nos vamos a ahogar”, externó el habitante de La Lima.

Yadira Mejía, quien caminaba con prisa sobre el puente La Democracia en la entrada de El Progreso, compartió que su confianza está en Dios, aunque aceptó que están bien informados acerca de la situación y de la posible impacto en el sur.

Ella mencionó que en cierto sentido, la comunidad ya está acostumbrada a este tipo de situaciones. Cuando se esperan lluvias intensas suelen dirigirse a zonas elevadas, como ciertas residenciales en San Pedro Sula, por ejemplo. Además, todos los días verifican el nivel del río en una tabla de medición.

Yadira, aunque mantiene su fe en que todo estará bien en medio de la tormenta, está dispuesta a correr y evacuar si la situación se complica, con la esperanza de que no ocurra ningún desastre.

El alcalde de Tegucigalpa, Jorge Aldana, solicitó a través de sus redes sociales elevar a alerta verde en la capital debido a la tormenta Pilar e instó a intensificar el monitoreo en zonas propensas a deslizamientos en el Distrito Central, así como el flujo de los ríos y quebradas importantes.

De su lado, el alcalde de San Pedro Sula, Roberto Contreras, instruyó a los equipos municipales a mantenerse alerta ante las lluvias derivadas de Pilar y aconsejó a los residentes en zonas vulnerables mantenerse informados ante cualquier emergencia.

En su última actualización, Copeco dejó en alerta todo Honduras. En nivel amarillo quedaron seis departamentos: Choluteca, Valle, El Paraíso, Francisco Morazán, Comayagua y La Paz. El resto de departamentos están en alerta verde.

En estas regiones se activaron los equipos de emergencia locales para brindar apoyo a las poblaciones en áreas de alto riesgo por inundaciones, deslizamientos y derrumbes.

Las autoridades locales también están vigilando de cerca las cuencas de ríos y quebradas importantes en caso de cualquier eventualidad. Este lunes, las autoridades de Educación suspendieron las clases en Choluteca, pero no determinaron hasta cuándo se mantendrá la medida.

La tormenta tropical Pilar, el décimo sexto ciclón con nombre de la temporada, se formó la noche del domingo al sur de la desembocadura del río Suchiate, que sirve de frontera natural entre México y Guatemala, según informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).

El SMN indicó en UN comunicado que Pilar se originó a partir de la depresión tropical diecinueve-E. De acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes, la alerta de tormenta tropical se encuentra activa para toda la costa de El Salvador, la costa pacífica de Honduras, incluyendo el Golfo de Fonseca, y abarca desde la frontera entre Honduras y Nicaragua hacia el sur hasta Puerto Sandino.

Ante la amenaza que representa la tormenta tropical Pilar, Protección Civil de El Salvador declaró una alerta roja a nivel nacional. Además, la Asamblea Legislativa aprobó el Estado de Emergencia por un período de 15 días, en un esfuerzo por preparar al país para afrontar esta situación meteorológica.

El Salvador, con 6.6 millones de habitantes, tiene el 87% de su escaso territorio de 20.742 kilómetros cuadrados vulnerable a inundaciones, deslizamientos de tierra y a constantes temblores.

Previamente, la alerta naranja se estableció debido a que “el nivel de riesgo incrementaba a un 75% de probabilidad de causar daños serios”, informó Protección Civil. ”Condiciones de tormenta tropical podrían ser posibles del martes temprano al miércoles a lo largo de partes de la costa de El Salvador”, indicaron las previsiones.

También señalaron que se esperan “fuertes lluvias por la depresión tropical (que) producirán rápidas inundaciones en áreas urbanas junto con deslizamientos en áreas altas de la costa del Pacífico de América Central”.

Desde el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos advirtieron oleaje y marejadas en la costa pacífica que “podrían poner en peligro la vida”.

El Ministerio de Educación de El Salvador decretó la suspensión de “actividades académicas” tanto en la costa como en el área metropolitana de la capital. También se puso en alerta a los sistemas de emergencia ante la necesidad de eventuales actuaciones, así como preparación de albergues, comunicó Protección Civil.

Las primeras dos víctimas de estas lluvias son un joven de 24 años y una mujer de 57 años, que fueron arrastrados por fuertes correntadas al cruzar ríos en el departamento de La Unión, a 200 km al este de San Salvador, según las autoridades. Además, un joven de 18 años se reportó como desaparecido en la playa San Diego, en el departamento de La Libertad, 40 km al sur de la capital salvadoreña, indicó el subdirector de Protección Civil, Fermín Pérez.

El fenómeno climático llega a Centroamérica cuando se cumplen 25 años del huracán Mitch, que dejó unos 9,000 muertos y millonarias pérdidas a la economía de los países de la región. Con 523,000 km2 y 50 millones de habitantes, Centroamérica es muy vulnerable a los fenómenos meteorológicos.