Ejecución de inversión pública en Honduras no llega ni a 17%

Analistas consideran que se deben revisar los presupuestos, los que, en algunos casos, están muy por encima de lo que se ejecuta

Foto: LA PRENSA

Gran parte de lo presupuestado para infraestructura no se ejecuta, ya que hay varias obras en proceso de licitación.

vie 26 de mayo de 2023

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Los datos publicados por la Secretaría de Finanzas muestran que, hasta la tercera semana de mayo, el presupuesto de inversión pública todavía no llega ni al 17% en su ejecución en Honduras.

Según la fuente consultada, hasta la fecha del análisis (22 de mayo), se han utilizado 1,983.3 millones de lempiras de un presupuesto vigente calculado en 11,874 millones, lo que equivale a un 16.7% de cumplimiento de acuerdo con las cifras publicadas por Finanzas.

La misma fuente detalla que los recursos usados hasta la fecha del análisis se agrupan en cuatro grandes sectores: Comunicaciones y Energía, con el 71.6% del total de recursos; Agroforestal y Turismo, con el 11.5%; Promoción y Protección Humana, con el 14.9%, y Fortalecimiento Institucional, con el 1.9% del total del monto.

Más en detalle, entre los subsectores que más recursos han ejecutado destacan los de Energía, con 1,124 millones de lempiras, lo que equivale al 50% de dichos recursos. En segundo lugar se ha priorizado la inversión en carreteras, si bien solo se han utilizado 265.5 millones; es decir, el 12.6% de los recursos invertidos, mientras que el tercer lugar lo tiene el subsector de Recurso Forestal y Ambiente, con una ejecución de 195.8 millones, equivalentes al 20.7% del total de recursos ejecutados en inversión pública.

Más atrás vienen importantes subsectores como Salud (12.1% de los fondos ejecutados) y Educación (7.4% de los fondos ejecutados).Cabe mencionar que, puesto que la Secretaría de Finanzas actualiza los datos diariamente, la información aquí presentada solo refleja la situación hasta el momento de la consulta.

Desempeño presupuestario

El patrón de gasto en el presupuesto de inversión pública parece seguir el del resto de la administración central, incluso ha tenido un peor desempeño. Mientras que en la parte de inversión pública el nivel de gasto es, como ya se mencionó, de 16.7%, dicho nivel se queda por debajo del promedio general, el cual, según los datos de Finanzas, es de 24.5% de ejecución.

Al analizar los datos publicados por las fuentes oficiales es posible medir el ritmo al que se están ejecutando los presupuestos en un momento dado. La Secretaría de Finanzas recopila los datos de más de un centenar de instituciones de la administración central como del sistema descentralizado. El análisis indica que, en promedio, en los primeros cuatro meses y medio de este año, las instituciones de Gobierno han invertido unos 850.9 millones de lempiras.

En términos generales, la administración central de gobierno concentra su gasto presupuestario en ocho áreas distintas, siendo la de Servicios Personales, que entre otras cosas incluye los salarios de los empleados públicos, aquella que mayores recursos ha consumido, con una cuarta parte del total (25.5%).

El segundo que mayores gastos registra en los primeros cuatro meses y medio del año es de las transferencias y donaciones, segmento que incluye los fondos que el Gobierno central envía a los gobiernos locales a nivel municipal. En este apartado se ha invertido el 19.5% de los fondos ejecutados de toda la administración de gobierno.

El tercero que más recursos les ha demandado a las autoridades es el servicio de la deuda, con el 16.9% de lo gastado hasta la fecha de este análisis.A nivel de instituciones individuales, la dependencia gubernamental con mejor desempeño presupuestario es la Secretaría de Turismo, cuyo porcentaje de ejecución se estima en 44.5%. Luego, en la segunda posición, se encuentra el Tribunal de Justicia Electoral, con 43.2%, y, un poco más atrás, viene la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), con un 42.1%.

Pero incluso entre las instituciones que han tenido mejor desempeño, ninguna logra superar el 50%.En el otro extremo del desempeño presupuestario se hallan instituciones como los Servicios Financieros de la Administración Central (0.3% de ejecución), el Instituto de Crédito Educativo (0.8% de ejecución) y el Programa de la Red Solidaria (1.4% de ejecución).

Presupuestos realistas

Los analistas coinciden en general en que los presupuestos necesitan ser revisados para adecuarlos a las circunstancias y evitar incertidumbres y cuestionamientos a la hora de fiscalizar lo que se presupuesta y compararlo con lo que en realidad se utiliza.

“Cuando no se ejecutan en las cantidades en que pidieron el propuesto, entonces ahí la gente se empieza a preguntar, bueno, ¿y por qué piden tanto si los fondos no se ejecutan? O sea que hay que ser realistas ahí”, observa la analista económica Liliana Castillo.

Ella hace notar lo común que resulta que, año con año, algunas partidas reciben cada vez más fondos, pero estos no se ejecutan. Y esto es todavía más importante cuando se trata de inversión pública.

“Lo que sí se ha dejado para inversión pública, ni siquiera ahorita no creo que vaya ni un 25% de lo que se le asignó, e igual pasó el año anterior, una bien baja ejecución en cuanto a ese renglón, que no llegó ni al 40%, y realmente lo que se requiere es que se dinamice más la inversión pública, porque no se ve mucho que se esté agilizando.

Las consecuencias de no ejecutar la inversión pública como ha sido presupuestada las explica el economista Rafael Delgado, quien señala que “detrás de todo ese presupuesto se supone que hay un análisis de prioridades, de tiempos, de urgencias y entonces no se puede retardar la ejecución. Acordémonos que de por sí la inversión pública dirigida al sector social es muy poca y si, además, se atrasa, complica mucho más el problema”.

LA PRENSA Premium trató de conocer la postura del Gobierno sobre el asunto, para lo cual contactó a la Dirección de Gestión por Resultados, pero, hasta el momento de escribir estas líneas, no había recibido respuesta.Cuando la inversión pública no se hace según el programa, no se genera empleo ni se desarrollan las obras que tanto se necesitan.