Ladrones sumen en la oscuridad a las principales ciudades de EEUU
Robos de metales dejan a varias ciudades en la oscuridad y con millonarias pérdidas.
Foto: Mark Abramson para THe New York Times
El Puente de la Calle 6 en Los Ángeles se apagó tras ser robado el cableado de cobre de sus luces. (Mark Abramson para THe New York Times)
Por: Michael Corkery/The New York Times
El Puente de la Calle 6 en Los Ángeles está cableado para brillar con luces de colores que celebran el espíritu de la Ciudad. Pero el puente, conocido como el “Listón de Luz”, ahora está apagado por la noche.
En St. Paul, Minnesota, un hombre fue atropellado recientemente por un auto y murió mientras cruzaba una calle donde el alumbrado público estaba apagado.
Y en Las Vegas, en los últimos dos años han desaparecido alrededor de 300 kilómetros de cableado eléctrico del alumbrado público.
Los ladrones han estado llevándose el cable de cobre de miles de arbotantes en ciudades estadounidenses y vendiéndolo junto con chatarra por dinero en efectivo. El cableado suele redituar unos cientos de dólares, pero las luces apagadas plantean riesgos de seguridad y su reparación está costando millones de dólares a las ciudades.
Algunos robos involucran elementos de infraestructura esencial de la Ciudad e incluso obras de arte públicas que alguna vez parecieron inamovibles. En el Condado de Los Ángeles, más de 290 hidrantes han desaparecido este año.
Los robos se producen en medio de una febril demanda de cobre y otros metales. El cobre, en particular, es un componente clave de los autos que funcionan con baterías, las redes eléctricas modernas y los nuevos centros de datos gigantes que alimentan la inteligencia artificial y otras tecnologías.
Desabasto mundial de cobre
“El mundo no se da abasto de cobre”, dijo Karthik Valluru, líder global del sector de industrias de materiales y procesos del Boston Consulting Group.
Se estima que habrá un desabasto mundial de hasta 10 millones de toneladas de cobre en los próximos dos años, afirmó Valluru. Pero desarrollar nuevas minas de cobre puede llevar una década o más.
En St. Paul, los arbotantes han sido populares entre los ladrones de cables. Cortan los postes o abren un pequeño panel en la base para extraer el cable.
“Tan pronto los arreglamos, regresa la gente y los arrebata nuevamente”, dijo el Alcalde Melvin Carter.
El mes pasado, el Gobernador de Minnesota firmó una ley que exigirá que las personas que vendan chatarra de cobre en Minnesota obtengan una licencia del Estado y acrediten que el material se obtuvo legalmente.
Kevin de León, miembro del Concejo Municipal de Los Ángeles, dijo que un grupo de trabajo contra el robo de metales, que incluye a agentes del Departamento de Policía de Los Ángeles, había estado investigando a las empresas de chatarra, no sólo a los ladrones callejeros.
El mes pasado, ladrones robaron placas de mausoleos del Cementerio Lincoln Memorial Park, en Carson, California.
“Solían decir que había honor entre los ladrones”, dijo De León. “Pero cuando estás robando placas de tumbas, ya caíste muy bajo”.
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