Don Rogelio corrió a refugiarse, pero murió por el machetazo
Don Rogelio Gómez fue herido con un machete en el cuello por su hijo, quien lleva el mismo nombre.Fotos: Moisés Valenzuela
Exclusivo para Suscriptores
¿Ya tiene su suscripción? Únase a nuestra comunidad de lectores.
SuscríbaseGracias por informarse con
La Prensa
Alcanzó su límite de artículos
Suscríbase y acceda a artículos, boletines, eventos y muchos más beneficios, sin límite.
SuscríbaseGracias por informarse con
La Prensa
Artículo exclusivo bajo registro
Inicie sesión o regístrese para acceder al mejor contenido periodístico.
Iniciar SesiónGracias por informarse con
La Prensa
Los residentes de la colonia Gracias a Dios están conmocionados por la muerte de don Rogelio Gómez, quien fue ultimado de un machetazo por su propio hijo.
El hecho ocurrió la tarde del domingo tras una discusión entre padre e hijo, luego de que don Rogelio, de oficio albañil, regañara a su hijo porque andaba en estado de ebriedad, según relataron vecinos de la víctima.
LA PRENSA llegó hasta la colonia Gracias a Dios, en la aldea Pinalejo, Quimistán, donde vecinos relataron cómo el hijo de don Rogelio, quien tiene su mismo nombre, se molestó tras la reprendida, sacó un machete e hirió a su progenitor en el cuello.
La discusión ocurrió en la vivienda de los hijos de don Rogelio, quien tras ser herido corrió unos 200 metros y buscó a refugiarse en la casa donde vivía, pero no le dio tiempo de ingresar ni ser auxiliado, cayó muerto en la parte de atrás.
Por la calle donde corrió aún hay rastros de sangre que fueron tapados por los vecinos con ramas de árboles que cortaron.
“Don Rogelio no vivía donde lo hirieron, en esa casa venden tortillas y viven sus hijos, el varón (que lo mató) y una hembra; el señor vino a morir en esa casa. Cuando vino la autoridad se los entregó a los amigos y lo velaron en el centro comunal”, contó Braulio Ramírez, vecino del fallecido.
Julio César Melgar, quien fue amigo de don Rogelio, relató que el señor, a pesar de que era nativo de Pinalejo, dejó a sus hijos y se fue a vivir a San Pedro Sula, ciudad de donde hacía poco había regresado.
“Tenía unos 20 años de haberse ido y hace un mes regresó, acá tenía sus hijos, aunque ellos no crecieron con él. Nos sorprendió este crimen porque acá es sano, esto no se había dado. El cipote nunca había hecho nada a otras personas, que haya herido o matado a alguien. El muchacho andaba bebido y el papá lo empezó a corregir, y así se dieron las cosas. Creo que no lo hizo con la intención de matarlo, lamentablemente la herida fue en el cuello y se desangró”, expresó Melgar.
La familia no quiso referirse al crimen, aseguran no saber nada y no quieren hablar de lo sucedido el domingo.
Audiencia
Rogelio Gómez Castillo, acusado por el Ministerio Público del delito de parricidio y quien guarda prisión bajo la medida de detención judicial, comparecerá a la audiencia inicial mañana jueves a las 9:00 am en el juzgado de lo Penal en Quimistán, Santa Bárbara, conforme a lo informado por las autoridades judiciales. La Fiscalía pide que continúe preso por crimen contra su padre.
El hecho ocurrió en la casa donde habitan sus hijos. Herido corrió unos 200 metros hacia la vivienda en donde residía, dejando rastros de sangre, adonde finalmente cayó muerto.
Fue velado sobre unas tablas en el centro comunal de la colonia Gracias a Dios.