Vendedores suspenden protesta en calles y avenidas de San Pedro Sula

La protesta fue pacífica y los manifestantes estuvieron frente a la catedral sampedrana.

Se espera que las protestas se extiendan hacia otros puntos del centro de la ciudad.

Exclusivo para Suscriptores

¿Ya tiene su suscripción? Únase a nuestra comunidad de lectores.

Suscríbase

Gracias por informarse con
La Prensa

Alcanzó su límite de artículos

Suscríbase y acceda a artículos, boletines, eventos y muchos más beneficios, sin límite.

Suscríbase

Gracias por informarse con
La Prensa

Artículo exclusivo bajo registro

Inicie sesión o regístrese para acceder al mejor contenido periodístico.

Iniciar Sesión

Gracias por informarse con
La Prensa

San Pedro Sula, Honduras.

Por segundo día consecutivo, un grupo de vendedores organizados protestaron frente a la alcaldía de San Pedro Sula exigiendo detener el supuesto desalojo de sus establecimientos o ser reubicados en un nuevo mercado municipal.

24 horas después del caos desatado en el centro de la ciudad, en acontecimientos matizados por la violencia y otros actos vandálicos, los manifestantes se apostaron portando pancartas con consignas que, entre otros mensajes, exigían a Roberto Contreras, alcalde de la ciudad, reunirse con ellos.

Los manifestantes mantenían, al filo del mediodía, bloqueada la tercera avenida en la intersección entre la primera y segunda calle, frente a la catedral y el parque central de la ciudad. Sin embargo, par de horas más tarde, la protesta se dispersó sin incidentes.

Varias mujeres alzan pancartas con consignas manifestantes.

Policías resguardan la casa municipal y, desde ayer, también recorren el centro de la ciudad para evitar saqueos y otros hechos violentos después de la crisis de la mañana del martes.

Calles que parecían haber sido escena de una batalla campal, negocios cerrados, personas atemorizadas atrapadas en tiendas y agentes policiales corriendo entre la tercera, cuarta y quinta avenida, así estaba ayer el centro de la Capital Industrial a eso de las 11:30 am. Esto luego de que un grupo de vendedores del sector informal protestaran frente al Palacio Municipal en contra del presunto desalojo ordenado por el alcalde Roberto Contreras.

El caos se apoderó del centro de San Pedro Sula.

Tras ser retirados por la Policía Nacional y agentes del Comando Cobras, los manifestantes, armados con pedazos de madera, artefactos metálicos y machetes, recorrieron dichas avenidas para exigir a los comerciantes que cerraran sus tiendas.

“Abrimos la tienda a las 8:30 am, como siempre lo hacemos, pero minutos más tarde llegó un grupo de muchachos a pedirnos que cerremos”, relató Carlos, quien trabaja en una comercial de la tercera avenida. El hombre, que prefirió omitir su apellido, contó que “al principio los manifestantes llegaron tranquilos, pero a otros comerciantes los obligaron a cerrar sus puertas por la fuerza”. Miedo En tanto, en el popular Pasaje Valle, decenas de personas permanecían encerradas, pues los guardias de seguridad no tuvieron otra opción que bajar las cortinas metálicas tras recibir fuertes advertencias.

Un equipo de periodistas de LA PRENSA realizó un recorrido por el centro de la ciudad en medio de la protesta para hablar con los comerciantes que fueron obligados a cerrar sus tiendas, pero la mayoría se rehusó a dar su opinión por temor a represalias. Negocios de comida rápida, farmacias, comerciales, tiendas de ropa, calzado, telas y salones de belleza, las fuertes protestas paralizaron el comercio en el centro, ocasionando grandes pérdidas económicas.

“Aquí estoy, un poco nerviosa al igual que nuestros clientes”, narró Nicole Escalón, quien trabaja desde hace varios años en una tienda que vende telas en la quinta avenida. “Escuchamos que venían golpeando las cortinas de los negocios, cuando vimos la multitud apenas logramos cerrar las cortinas. Lo primero que pensé fue que se iban a meter a saquear. No hemos podido comer por el temor”, prosiguió. Pérdidas Escalón señaló que el cierre de negocios ha ocasionado pérdidas cuantiosas tanto para Daritex como para los demás comercios, ya que “prácticamente se perdió un día entero de trabajo”.

Por su parte, Aida García, que trabaja en una tienda de ropa clasificada, compartió que aún con temor decidieron trabajar a medio vapor en horas de la tarde.

Decenas de hombres cerraban negocios del centro de la ciudad amenazando a propietarios.

Tras los disturbios, un fuerte contingente de la Policía Nacional, el Comando Cobras y la Dirección Policial de Investigaciones resguardaban el Palacio Municipal. “Estábamos encerrados y llegaron a golpearnos las cortinas. Teníamos mucho miedo, pero cuando las cosas se calmaron un poco decidimos dejar la cortina a la mitad para atender a las personas que llegaran”, indicó García.

Sin embargo, dijo que para ser realista no esperaban que llegaran muchos clientes luego de los disturbios ocurridos en la ciudad, por lo que manifestó que espera que “las partes involucradas puedan llegar a un acuerdo”. Durante la protesta de ayer, varios locales sufrieron daños, por lo que los comerciantes temen que esta situación se prolongue y sean víctimas de vandalismo como en 2017, cuando algunos comercios de la ciudad sufrieron saqueos.

Honduras
San Pedro Sula
Roberto Contreras