De 30.6% a 38% subieron las pérdidas de la Enee

San Pedro Sula

En febrero de 2022, el balance de pérdidas de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee), de acuerdo con los informes de la consultora Manitoba Hydro International, era de 30.6%.

Un año después, y según el propio gerente de la Enee y -a la vez- ministro de Energía, Erick Tejeda, el nivel pérdidas se encuentra actualmente en 38%.Se estima que las pérdidas de energía alcanzaron los 20,788.7 millones de lempiras por las fallas en el sistema de distribución y en la red de transmisión. En el 2021 cerraron en 14,613.9 millones de lempiras.

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La Enee arrancó hacia finales del año pasado su propio programa de reducción de pérdidas, pero el gerente de la estatal recuerda que, en tanto finaliza su contrato, la responsabilidad principal por esta labor recae sobre el consorcio colombo-hondureño de Empresa Energía Honduras (EEH).

LA PRENSA Premium trató de conocer la versión de esta empresa sobre el particular, pero hasta el momento de la publicación de este reportaje todavía no había recibido respuesta.

La aparente falta de cumplimiento de EEH con respecto a los objetivos para los que se le contrató: inversión en infraestructura de la red de distribución y la reducción de las pérdidas de energía, llevó a las autoridades a interponer acciones legales contra la concesionaria, mediante las cuales la Enee espera obtener hasta 15 mil millones de lempiras en compensaciones.

Tejeda, por su parte, informa que, desde que el Programa Nacional de Reducción de Pérdidas (PNRP) dio comienzo a sus funciones, en noviembre pasado, “nos hemos encontrado con una mora de aproximadamente 450 mil medidores que no estaban instalados y que podrían convertirse en 600 mil el otro año. Y, en general, que falta la normalización de muchísimos clientes, sobre todo industriales y comerciales y también residenciales”.

El funcionario asegura que el objetivo del PNRP, que en este momento opera de forma paralela al de EEH, consiste en “acelerar” la reducción de pérdidas.

“Ya tenemos en el programa más de 10 mil acciones ejecutadas. Hemos encontrado más de 7 mil anomalías. Hemos instalado más de 5 mil medidores y ya se han reportado también conexiones ilegales de altos consumidores en el sector industrial y comercial”, refirió.

Las autoridades de la Enee anunciaron que la meta inicial de su programa de reducción de pérdidas es de un 4%. Esta cifra, explica el gerente Tejeda, es congruente con los estudios y análisis que ha efectuado, para lo cual han tomado en cuenta las recomendaciones del sector privado y básicamente son las mismas metas estipuladas en el contrato de EEH.

“El contrato inicial de EEH planteaba una meta de 4% el primer año, 3% el segundo año, 3% el tercer año y 2% el último año, más 2% en transmisión”, señala el funcionario, quien agrega que “estos son indicadores interanuales. Vamos midiendo también los indicadores intermensuales, pero no queremos engañar tampoco a la población. Nos estamos planteando metas realistas”.

Algunos expertos consultados eran de la opinión de que la meta anunciada era más bien modesta y que, para compensar el aumento de las pérdidas, la meta tendría que ser más ambiciosa.

“Lo que la (Enee) necesita es reducir al menos un 12% en los próximos dos años. Nosotros hemos hecho algunos cálculos a ese respecto y con que la Enee reduzca un 12% de pérdidas en los próximos dos años, entonces es algo más agresivo de lo que el gobierno está apuntando”, observa Luis Suazo, ingeniero eléctrico y catedrático universitario, de lo que se desprende que la meta para este primer año tendría que ser de, al menos, 6%.

“Es muy modesta la meta”, puntualiza. Pero aún si se acepta que la reducción de cuatro puntos porcentuales es lo viable, las complejidades del asunto son tan grandes que la Enee, incluso con una meta modesta, no lo tendría fácil.

“No solo se trata de ir a las calles con las cuadrillas e ir cortando y encontrando la gente que está robando. También hay un componente que se llama pérdidas técnicas, que no tiene nada que ver con las pérdidas no técnicas, que básicamente son el robo y falta de instalación de mediadores”, comenta Salomón Ordóñez, asesor de la industria eléctrica.

Ordóñez argumenta que la Enee necesita una “infusión de dinero” para poder realizar un control y una reducción efectiva de las pérdidas.

El asesor considera que los planes delineados por la Enee son “muy buenos”, pero a la vez señala hacia uno de los principales problemas que tiene la estatal: “La Enee no tiene fondos, está en quiebra”.

Ordóñez estima que, para la recuperación de las pérdidas técnicas, se requieren entre 200 y 300 millones de dólares en inversión, recursos que serían utilizados sobre todo en reparar y sustituir los componentes del sistema de transmisión y distribución que son los responsables de las pérdidas por motivos técnicos.Por el lado de las pérdidas técnicas, el experto señala que se necesita combatir un crónico déficit de medidores.

“Hay un déficit de más de 40 mil medidores que deberían haber sido instalados y que no han sido instalados por EEH”, asegura.

“En mi opinión lo más crítico es conseguir los fondos suficientes para que se puedan hacer todas las intervenciones, todas las inversiones que se requieren para reducir de pérdidas. De lo contrario la Enee no va a salir de su crisis financiera, esta solo va a ir creciendo”, observó.

San Pedro Sula. Han pasado apenas un par de meses desde el lanzamiento del Programa Nacional de Reducción de Pérdidas (PNRP) de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee) y las cosas parecen comenzar con mal pie a causa de la inconformidad de los trabajadores contratados para efectuar esta labor, quienes alegan que la empresa estatal no ha honrado su compromiso de pagarles puntualmente sus salarios.

El abogado David Rodríguez, del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), actuando como vocero de los trabajadores, explicó la situación en el marco de una protesta efectuada este martes en San Pedro Sula. Sostuvo que el pago de la nómina fluye a cuentagotas, “solo con grupitos de dos o tres personas”, mientras que la gran mayoría ha recibido muy poco o nada de su salario correspondiente.

Rodríguez agrega que, además de la ausencia de pago, los trabajadores enfrentan otros problemas, como la supresión de algunos derechos laborales como la atención médica en el Seguro Social y que, cuando protestan individualmente por esa situación, los representantes de la Enee les muestran la puerta, señalando que “si no te gusta, andate”.

El vocero de los trabajadores manifestó, además, que la empresa no le provee a los empleados que contrata de los implementos necesarios para efectuar su labor, sino que ellos mismos tienen que costeárselos, lo que aumenta el malestar de los trabajadores.

“Ellos están trabajando con sus propias herramientas, traen sus propias escaleras, sus propias tenazas, todas las herramientas, y la empresa no las está dando”, señaló. El programa del PNRP fue lanzado en San Pedro Sula el pasado 28 de noviembre.