Más de 900 mil personas viajaron al exterior a lo largo de 2022

San Pedro Sula

De acuerdo con las cifras que publica el Instituto Nacional de Migración (INM), la industria de los viajes aéreos al exterior prácticamente se ha recuperado, al punto de volver a los niveles que tenía antes de la llegada de la pandemia de covid-19, la cual puso en pausa los viajes hacia y desde el exterior.

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Antes de la pandemia, en 2019, más de 945 mil personas salieron de territorio hondureño por la vía aérea, para dar paso a una caída en 2020 y 2021 por causa de las restricciones a los viajes impuestas a raíz de la pandemia del covid-19.

Sin embargo, según publica el INM, hasta el pasado 9 de diciembre, las terminales aeroportuarias hondureñas registraban la salida de 908,384 personas, es decir, bastante cerca de los niveles anteriores a la emergencia sanitaria mundial.

El destino por excelencia para los viajeros que salen de Honduras es Estados Unidos de América.

Hacia ese destino partieron 7 de cada 10 viajeros en el último año, una tendencia que se ha mantenido a lo largo del tiempo.En números concretos, viajaron a Estados Unidos más de 634,000 personas, el equivalente al 69.8% de todos los que se desplazaron este año a ese país.

Dicha cifra es incluso mayor que la registrada en 2019, último año antes de la pandemia, cuando se contabilizó la salida de poco más de 585,000 personas hacia ese destino en particular.

El segundo país más popular para los hondureños es España, al que viajaron más de 66 mil 200 tan solo este año, lo que representa el 7.3% de todos los que viajaron este año.

El tercer destino concreto al que más se viaja desde Honduras queda dentro de la misma región centroamericana y no es otro que el país vecino de Guatemala.

Según el INM, algo más de 33,300 personas de desplazaron a tierras chapinas, cifra que se corresponde con el 3.7% del total de viajeros a lo largo de este año.

Otros lugares a los que viaja un buen número de personas incluyen a países como México, Panamá, Costa Rica y El Salvador, en otras palabras, fuera de los que van a Estados Unidos o a España, el resto de viajeros se queda en su mayor parte en la región centroamericana o sus inmediaciones.

Las autoridades del INM registran una lista de al menos ocho motivos principales por los que los hondureños viajan al extranjero.

El motivo por excelencia se relaciona con los que no viven habitualmente en el país, pues han fijado su residencia en el extranjero, principalmente en Estados Unidos.

Más de la mitad de las salidas que se han registrado este año (55%) corresponden a estos compatriotas retornando a sus hogares. En cifras concretas, hablamos de más de 504 mil personas.

Aproximadamente un tercio sale por motivos de turismo, razón por la que este año se han marchado más de 335,800 personas, lo que equivale a cerca del 37%.

Un importante motivo para salir del país son los negocios, pero este solo ocupa la tercera posición entre los que viajaron este año, constituyendo el 2.9% de los viajeros, lo que equivale a unas 26,700 personas.

Otros contingentes importantes incluye el de los trabajadores temporales, que irrumpen en los registros de viajes desde 2020 y se ha venido incrementando desde entonces. De los 3,157 que se registraron hace dos años, se ha pasado a los 12,417 este año.

En términos porcentuales, pasaron de 1.06% en 2020 a 1.37% en 2022.Una minoría de viajeros lo hicieron por motivos de estudios en el extranjero (0.79%) o como parte de sus deberes oficiales como funcionarios de gobierno (0.67).

Históricamente, la terminal por la que más viajeros pasan en su ruta de salida es el aeropuerto Ramón Villeda Morales de San Pedro Sula. En los últimos siete años (desde 2015) han salido por esa terminal más de 3.3 millones de personas.

Tan solo en el último año registró más de 492,800 salidas, lo que equivale al 54% del total.Y aunque solo ha estado en servicio durante poco más de un año, el aeropuerto de Palmerola en Comayagua ya es la segunda terminal por la cual salen más viajeros del país.

Tan solo en 2022, por Palmerola salieron más de 290,200 personas, lo que representa casi un tercio de todos los que viajaron este año (31.9%).

En tercer lugar está el aeropuerto Juan Manuel Gálvez de Roatán, Islas de la Bahía, un destino turístico por excelencia en Honduras tanto para viajeros nacionales como extranjeros.

Esta terminal aportó el 11.5% de todo el tráfico de salidas aeroportuarias este año, por lo que más de 104,800 personas salieron de Honduras a través de ella.

En cuanto a la terminal del Toncontín, con la apertura del aeródromo de Comayagua, su nivel de tráfico de pasajeros se redujo considerablemente, pasado de movilizar a más de 304,000 pasajero en 2019 (32% del total, antes de la pandemia), a solo 13,420 en 2022, es decir, el 1.48% del total, lo que, en términos absolutos, representa una caída de 96% en su flujo de pasajeros.

En el otro extremo de este espectro figuran los aeropuertos regionales, los que prácticamente no han figurado en las cifras oficiales. El único que arroja algún dato es el aeródromo de Tela, que entre 2015 y 2022, registró la salida de 78 personas.

El grupo de personas que más salió de Honduras este año se compone de aquellos que tienen entre 31 y 40 años, pues en ese rango de edad se encuentra cerca del 20% del total de viajeros, unas 144,000 personas.

Detrás de ellos vienen los adultos de entre 41 y 50 años, con 18.34% del total, seguidos de los adultos jóvenes de entre 21 y 30 años, los que a su vez son seguidos muy de cerca por los adultos de entre 51 y 60 años.

Los más jóvenes, es decir, quienes tienen menos de 20 años constituyen un aproximado de 16% de todos los que salieron del país este año, mientras que los viajeros de la tercera edad, de 60 o más años, representan el 15% de todos los viajeros.

Si nos atenemos al género, los hombres adultos son los que más viajan, pues constituyen el 42%, pero la diferencia con respecto a las mujeres no es muy grande, pues 41.7 de las salidas al exterior corresponden a mujeres. Con estos números, podemos concluir que el flujo de viajeros ha vuelto al nivel de prepandemia.