Esta es la historia de las cinco iglesias de Comayagua, cuna del turismo religioso

En la torre de la catedral de la Inmaculada Concepción se encuentra el reloj de pesas y engranajes más antiguo del mundo. Turistas pueden explorar las cinco iglesias ubicadas en el centro de la ciudad

La catedral de la Inmaculada Concepción, considerada la más majestuosa y grande construida durante la época colonial en Honduras.

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Comayagua, Honduras

La ciudad colonial de Comayagua, situada en el corazón de Honduras, alberga un valioso patrimonio religioso que se remonta a 1545. A pesar de las mejoras realizadas en sus templos, estos mantienen intacto su diseño original.

LA PRENSA exploró las cinco iglesias de Comayagua, destinos que atraen cada año a miles de turistas nacionales e internacionales. Comayagua, conocida como la cuna del turismo religioso en Honduras, destaca por sus cinco majestuosas iglesias coloniales.

En cada una de ellas habrá diferentes actividades organizadas por la iglesia católica que recuerda la muerte y resureección de Cristo.

La catedral de la Inmaculada Concepción, considerada la más majestuosa y grande construida durante la época colonial en Honduras, comenzó su edificación en 1650 y se completó en 1715.

La construcción de este imponente templo tomó 65 años, empleando materiales como arena, piedra y cal. La mezcla se elaboraba con la corteza del árbol cablote, cuya fermentación al retirarle la cáscara permitía combinar la arena y la cal.

Su fachada es de estilo de arte barroco renacentista, no es un barroco puro, sino un estilo hispano-americano; dividida en tres cuerpos, tres calles y un remate mixtilíneo con imágenes de San Jerónimo y San Agustín que según la ley divina se consideran Doctores de la Fe.

En la parte frontal destaca un cuadro conocido como "La Puerta del Cielo", con un óculo santo en el centro que iluminaba el interior del templo. Sobre el óculo se encuentra la tiara papal, que identifica a la catedral como basílica, otorgándole los mismos derechos que la Basílica de San Juan de Letrán en Roma, privilegio concedido por el Papa Pío IX.

En el altar mayor de la catedral de Inmaculada Concepción se destacan tres retablos de madera dorada.

En la torre de la catedral se encuentra el reloj de pesas y engranajes más antiguo del mundo, aún en funcionamiento, fabricado por los árabes alrededor del año 1100.

El reloj fue repartido como botín de guerra al Duque de Cocentaina. El obispo que nombran en Comayagua era sobrino del duque y le expresó "cuando tengas tu iglesia te doy mi reloj de la Alhambra para que lo instales en ella". El reloj trabaja a base de peso, no hay electricidad ni batería para que lo mueva, todo es a base de gravedad.

La historia cuenta que la iglesia fue el lugar de boda del general Francisco Morazán, el 30 de diciembre de 1825.

La fachada de la Iglesia de Nuestra Señora de la Caridad de Illescas, construida en 1640, refleja la transición entre el barroco y el neoclásico. Este templo fue destinado a la evangelización de indios y negros, en una época marcada por la separación de clases sociales en Comayagua.

En su interior, los negros asistían a la misa y giraban la imagen para que los indios la recibieran afuera, ya que eran politeístas. Según sus creencias, ingresar al templo podría provocar su colapso y quedar sepultados.

La iglesia Nuestra Señora de la Caridad de Illescas fue remozada.

La Iglesia de Nuestra Señora de la Merced se considera la iglesia más antigua de Honduras, construida en el año 1550. Esta fue la primera catedral de Comayagua, elevada a esa categoría en el año 1561.

Tiene un retablo que lo talló un carpintero llamado José Coronado Chávez, que después de ser carpintero se convirtió en presidente de Honduras (1845-1847).

En 1847 talló el altar mayor en la ciudad de Juticalpa, Olancho, en esa época ya no ostentaba el cargo de presidente.

La iglesia de Nuestra Señora de la Merced se considera la iglesia más antigua de Honduras, construida en el año 1550.

La Iglesia San Sebastián se considera iglesia y parroquia de los Santos Mártires. El templo, construido en 1580, alberga los restos del prócer hondureño José Trinidad Cabañas y del primer obispo del país, Hipólito Casiano Flores. Además, su retablo está dedicado a San Sebastián.

En este templo nace la historia del "Baile de los diablitos", obra de teatro más antigua que se ha celebrado en Honduras, su primera presentación fue en 1643.

En la iglesia San Sebastián, construida en 1580, se encuentran los restos del prócer hondureño José Trinidad Cabañas.

La Iglesia San Francisco de Asís, reconocida como la segunda orden eclesiástica más antigua de Comayagua, fue construida en 1574. Este templo destaca por albergar en su torre la campana más antigua de América, fundida en 1460 en Alcalá de Henares, España.

En el interior del templo se encuentra la venerada imagen de Jesús Nazareno, que participa en la procesión del Santo Viacrucis durante Semana Santa. Además, el templo alberga valiosas imágenes del siglo XV y resguarda una rica historia en su interior.

La iglesia San Francisco de Asís está en proceso de remodelación, con trabajos en el interior que incluyen el cambio de techos, gradas y diversas mejoras estructurales.

El Palacio Episcopal, un destacado museo de arte religioso, es un edificio histórico construido en 1545. Ocupa una manzana completa, lo que aporta unidad estilística a la zona. En este emblemático lugar funcionó el Colegio Tridentino y posteriormente la primera Universidad Nacional de Honduras.

La resolución de crear el colegio seminario se tomó en 1682, abriéndose inicialmente la cátedra en los salones del mismo palacio episcopal, mientras se hacía la construcción propia del colegio.

Para ese momento el obispo Vargas y Abarca estaba enfrascado en la construcción de la nueva catedral, por lo cual dedicó todo su esfuerzo y recurso a ello, dejando únicamente iniciados los cimientos del Colegio Tridentino. Las obras de ambos inmuebles fueron finalizadas por el obispo López Portillo en 1735.

Se agolpa en su interior, preciosos objetos de refinada orfebrería; pectorales, copones, cálices, medallas, custodias, etc.

Además, se encuentran casullas, sillones, lámparas, bandejas, atriles, báculos y pinturas que datan de los siglos 15, 16, 17 y 18. También destacan esculturas de madera de San Pedro y San Ignacio, junto con libros consagratorios, misales, baúles, crucifijos e imágenes de San Judas Tadeo, Don Pedro Boquín, la Virgen de la Caridad y San Benito.

La primera construcción, residencia del obispo, estaba ubicada detrás de la actual catedral y fue conocida por el nombre de "Las Casas Episcopales", construidas a inicio del Siglo XVII por el obispo Fray Caspar de Quintanilla y Andrada. El 15 de diciembre de 2009 el inmueble fue destruido por un feroz incendio.

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