Claman para que terminen casas a damnificados por Eta y Iota

Unas 290 familias que perdieron sus viviendas arrasadas por un alud en 2020 tras el paso de las tormentas Eta y Iota están desesperadas por el abandono de un proyecto que les daría un nuevo lugar para vivir.

Ante la impotencia y desesperación por el sufrimiento de las 290 familias, el padre Leopoldo Serrano, quien vela por la comunidad San Francisco de Asís, de Macuelizo, Santa Bárbara, comenzó ayer una maratónica caminata desde San Pedro Sula hasta Casa Presidencial, en Tegucigalpa.

El objetivo del religioso es que la presidenta Xiomara Castro termine un proyecto habitacional que dejó abandonado la Unidad Coordinadora de Proyectos (UCP) y el Instituto de la Propiedad (IP), debido a que la Secretaría de Finanzas les quitó los fondos para continuarlos.

“Quiero invitarles a que caminen conmigo hasta Tegucigalpa, para pedirle a la presidenta que continúe el proyecto que está abandonado de los damnificados de La Reina y otras comunidades”, dijo el religioso en un video difundido en las redes sociales.

El proyecto consiste en la construcción de 290 viviendas y una iglesia en Macuelizo, Santa Bárbara, que beneficia a igual número de personas, pero lamentablemente el Gobierno actual lo dejó abandonado.

Las obras ya estaban por finalizar, con una inversión de 137.5 millones de lempiras, de los cuales ya se habían ejecutado 122.1 y solo faltaban 16.3 millones para culminar, conforme a datos proporcionados por el IP.

Este proyecto era ejecutado por la UCP, que recibía fondos del Instituto de la Propiedad, pero debido a una serie de irregularidades encontradas y la eliminación de los fideicomisos fueron detenidos.

Pese a las necesidades, el Gobierno actual no ha sido capaz de reactivar las obras, afectando a las familias que serán beneficiadas con las viviendas de los damnificados de las tormentas tropicales Eta y Iota.

“Me duele ver a muchos niños enfermos de dengue porque no hay energía eléctrica para refrescarse un poquito, muchos adultos durmiendo afuera de las casas porque están desesperados”, lamentó el religioso.

Reseñó que estas personas ya tienen cuatro años de estar sufriendo y de estar abandonados, por eso caminará más de 200 kilómetros hasta Tegucigalpa, para solicitar, “por favor”, a la presidenta Xiomara Castro que regresen el dinero del fideicomiso que le pertenece a este proyecto.

La caminata comenzó ayer jueves 27 de junio a las 7:00 am desde el puente de Chamelecón en San Pedro Sula, “acompáñenme, por favor, a caminar por los damnificados”, pidió el religioso.

Este medio constató que debido a que el Gobierno dejó abandonado el proyecto, por necesidad los damnificados se instalaron en las casas, que les faltaban detalles para ser entregadas.

A pesar de que solicitaron el servicio de electricidad no se los ha instalado la Enee, tampoco tienen agua potable.