Doloroso adiós a Any Dubón, bebé que murió atropellada en San Pedro Sula

Any Monserrat Dubón Urbina, de ocho meses de nacida, fue sepultada este martes en el cementerio La Puerta, de San Pedro Sula.

Familiares se mostraron consternados por la trágica muerte de la menor.

Consternación, lágrimas y dolor invadió a parientes y conocidos que despidieron a la pequeña.

Dany Fernández, quien es padrastro de la madre de la niña, con voz entrecortada, lamentó el trágico desenlace y pidió a las autoridades esclarecer el hecho.

Fernández, también apeló a la voluntad de los hondureños pidiendo ayuda económica para cubrir gastos médicos de su hijastra, quien se debate entre la vida y la muerte en el hospital

Hoy, mientras sepultaban a la bebé, su madre fue intervenida quirúrgicamente en el hospital Mario Catarino Rivas, de San Pedro Sula.

Parientes lloran la muerte de la bebé Any Dubón, de ocho meses.

Familiares trasladan el ataúd en el que yacen los restos mortales de la pequeña.

La jovencita Any Yasmín Urbina (de 18 años) está viviendo momentos trágicos, pues se encuentra en estado crítico de salud y perdió a su hija de ochos meses luego de que las atropellara un carro en el bulevar del este de esta ciudad.

La tragedia ocurrió a eso de las 6:30 am en la trocha de esa vía que conduce al centro de la ciudad frente a la avenida que sirve de acceso a las colonias San Carlos de Sula y San Roberto de Sula.

El cuerpo de la bebé Any Moserrat Dubón Urbina quedó debajo de la carrocería de un camión cercano a las llantas traseras.

Elvin Zelaya, conductor del camión, relató que él estaba estacionado a la orilla de la trocha y de repente escuchó un estruendo y “yo creía que habían pegado atrás de la carrocería”. Dijo que al bajarse miró que estaba una motocicleta y el conductor de la misma sobre el pavimento porque fue atropellado por una camioneta color negro que se dio a la fuga.

Según el conductor, la camioneta también atropelló a la jovencita que iba a cruzar al otro extremo del bulevar con su niña en brazos y ambas cayeron en el pavimento. La joven se logró levantar herida y sacando fuerza de flaqueza cogió a su niña en brazos y se fue a sentar al bordillo del bulevar donde estaba estacionado el camión.