Estado de excepción en Honduras: 680 mujeres asesinadas desde diciembre de 2022
Jackeline Valle, Crimalda Meléndez, María Villatoro, Gabriela Larios, Elda Aldana, Dorys Euceda, Martiza Castro, Nelly Martínez, Irma Fajardo y Rosa Morán.
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Desde diciembre de 2022, que el Gobierno mantiene un estado de excepción en Honduras, 680 mujeres perdieron la vida de forma violenta, de acuerdo al recuento del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh).
Cada 26 horas, matan una mujer en Honduras. Aurora Rueda, coordinadora de la Defensoría de la Mujer del Conadeh, se solidarizó con los familiares de las víctimas e hizo un llamado a las autoridades “a establecer mecanismos efectivos de seguridad” que permitan fortalecer la protección del derecho a la vida en el país.
Recordó que el Estado hondureño tiene la responsabilidad de garantizarle a las mujeres una vida libre de violencia. “Es urgente que se tomen medidas preventivas y se atiendan los casos de violencia contra las mujeres, antes que ocurran hechos irreparables, como es la pérdida de la vida”, dijo Rueda.
Agregó que la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos ha puesto en relieve la obligación de los Estados de actuar con la debida diligencia en los procesos de investigación, con miras a reducir los altos índices de impunidad que, en Honduras, ronda el 95% de los casos, negándole a los familiares el derecho a conocer la verdad.
“Es necesario que se fortalezca la investigación y se perfeccione la coordinación entre los operadores de justicia para reducir drásticamente ese nivel de impunidad prevaleciente en el país, en los delitos contra la vida”, señaló.
La funcionaria indicó que en los primeros días de enero de 2025 ya suman, al menos, una docena de muertes violentas de mujeres y adicionalmente, otras tres tentativas de femicidio, lo cual debe ser motivo de preocupación para las autoridades y la sociedad en general.
Agregó que la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos ha puesto en relieve la obligación de los Estados de actuar con la debida diligencia en los procesos de investigación, con miras a reducir los altos índices de impunidad que, en Honduras, ronda el 95% de los casos, negándole a los familiares el derecho a conocer la verdad.
“Es necesario que se fortalezca la investigación y se perfeccione la coordinación entre los operadores de justicia para reducir drásticamente ese nivel de impunidad prevaleciente en el país, en los delitos contra la vida”, señaló.
La funcionaria indicó que en los primeros días de enero de 2025 ya suman, al menos, una docena de muertes violentas de mujeres y adicionalmente, otras tres tentativas de femicidio, lo cual debe ser motivo de preocupación para las autoridades y la sociedad en general.