Más de 10,000 menores dejaron las aulas de clases

Ayudas sociales como becas, merienda, bolsones escolares y reforzar programas son algunas estrategias que tienen las autoridades para enfrentar la deserción.

La pobreza es uno de los principales factores de la deserción escolar en el país.

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Tegucigalpa

La falta de estrategias para combatir el abandono escolar está causando que más niños y niñas se retiren de las aulas de clases y no regresen.

De acuerdo con el investigador y coordinador del Observatorio Educativo de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (Upnfm), Mario Alas, actualmente en el país hay más de 600,000 menores de entre 5 y 17 años fuera del sistema educativo hondureño, por lo que es necesario crear estrategias que permitan la reinserción.

Esa cifra representa el número de niños y niñas que no lograron ingresar a un centro educativo este año; sin embargo, de los que lograron entrar, más de 10,000 abandonaron las aulas.

Los datos de la Secretaría de Educación señalan que del 1 de febrero al 21 de agosto se retiraron del sistema 10,288 menores, lo que representa el 0.56% de la matrícula total nacional.

Los departamentos de Islas de la Bahía y Yoro representan las tasas más altas de deserción (1.45% y 1.06% respectivamente).

De Yoro la matrícula es de 123,557, desertaron 1,315; de Islas de la Bahía la matrícula es de 17,004 y 246 dejaron sus estudios.

Mientras que en Cortés se han retirado 1,925 menores, de una matrícula de 326,376, lo que representa el 0.59% de los inscritos en el departamento.

En Francisco Morazán, de los 332,174 estudiantes matriculadas abandonaron las aulas 1,275 (0.38%).

Los más de 10,000 alumnos que ya no regresaron a las aulas representan el 21.5% respecto al número de desertores de 2021, que fueron 47,859, según las cifras de Educación.

Más de 80% de los menores que abandonaron sus estudios son del nivel básica (de primero a noveno grado).

La cifra, indicó Alas, plantea el reto de cómo hacer para retornar a las aulas a esos menores, “por supuesto para los menores de 15 años en adelante, ya es difícil que regresen solo a estudiar, habrá que ofrecerles programas flexibles que les permitan desarrollar alguna actividad económica y estudiar”.

Aunque la pobreza y la violencia que derivan en la migración son las causas más comunes de la deserción escolar, factores internos como el acoso en los centros educativos, la falta de reforzamiento académico, y de acompañamiento de los padres a los menores influyen en el incremento de las cifras, establece el reciente estudio “Razones por las cuales los niños y las niñas se encuentran fuera del sistema educativo”, realizado por el Observatorio Educativo de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán y la organización Visión Mundial.

Partiendo de esas causas, las autoridades de la Secretaría de Educación, en apoyo con los cooperantes y otras entidades estatales desarrollarán estrategias para hacerle frente a la situación.

La viceministra de asuntos pedagógicos, Marisela Figueroa, dijo que el Gobierno, a través de la Secretaría de Desarrollo Social, implementará programas para regresar a los menores a los centros educativos.

“La merienda escolar es un ancla, porque hay niños tan pobres que no tienen alimento en su casa, se dará a 1.3 millones de alumnos; también vamos a incluir programas de cultura, el arte y el deporte, se darán becas por pobreza y excelencia académica, esa es otra motivación para atraer esa población, además de bolsones escolares”, detalló.

Las ayudas se empezarán a dar el próximo año, señaló Figueroa.“Estamos ocupándonos del asunto, creemos que al tener todas las ayudas sociales pretendemos contrarrestar esta situación. No ha sido fácil, pero estamos sentando las bases, lo vamos logrando poco a poco”.

La funcionaria aseguró que con las estrategias de reinserción que desarrollarán, van a reingresar a 400,000 menores al sistema educativo en los cuatro años de Gobierno.

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