Familiares niegan que víctimas en Esparta fueran delincuentes

San Pedro Sula

Con mucho dolor e impotencia, familiares reclamaron ayer en la morgue sampedrana los cuerpos de los tres hombres encontrados sin vida la mañana del domingo en una plantación de palma aceitera en la comunidad Colorado Barra, del municipio de Esparta, Atlántida.

A los infortunados, quienes al momento de su levantamiento estaban desconocidos, los identificaron como Reinaldo Cardona Díaz (de 26 años) y Jairo Leonel Orellana Marín (de 24), ambos amigos residentes en la aldea Zapote ubicada en la comunidad de San Juan Pueblo, La Masica, Atlántida.

Según los dolientes, trabajaban como agricultores y chapeando propiedades.

La tercera víctima respondía al nombre de German Gómez Mairena (de 33), residente de la comunidad Siempre Viva, en el municipio de Esparta, quien trabajaba en las propiedades de su padre, indicaron conocidos.

Santos Maximina Marín, madre de Jairo Leonel, contó que el joven era padre de una niña de nueve meses. Doña Santos, al igual que los familiares de los otros dos infortunados, negaron rotundamente que los tres fueran parte de la banda de los Tacamiches, ni invasores de fincas y mucho menos que fueran delincuentes, como indica el reporte de la Policía en cuanto a las primeras hipótesis de las investigaciones.

“Mi hijo no era un delincuente, mi hijo se ganaba la vida de manera honrada. Somos gente humilde”, acotó en las afueras de la morgue.

Don José Cruz, padre de Jairo, dijo que supone que el objetivo de los delincuentes era German Gómez Mairena, ya que posiblemente tenía enemigos. Para que su hijo y su amigo no contaran sobre el crimen, los mataron y por eso aparecieron los tres juntos. Dijo que no conocían a Mairena. Reclamó que las autoridades policiales quieran inculpar a su vástago en hechos delictivos y pidió que investiguen el triple crimen y que capturen a los responsables.

Hasta ayer las autoridades no informaron sobre avances en las investigaciones del hecho.