Autorizan ingreso de visitas al Villeda Morales y resurge el comercio

Desde que inició la pandemia, las autoridades de Ehisa por prevención no permitían que los pasajeros ingresaran acompañados, medida que se eliminó desde ayer.

En la terminal aérea funcionan más de 15 restaurantes y cafés.

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San Pedro Sula, Honduras.

El vestíbulo del aeropuerto Ramón Villeda Morales cobró vida ayer con la alegría y tristeza de las despedidas y recibimientos entre los viajeros, sus familiares y amigos.

Tras dos años de no permitir el ingreso de familiares por la pandemia, ayer las autoridades de la Empresa Hondureña de Infraestructura y Servicios Aeroportuarios (Ehisa) informaron que los aeropuertos Ramón Villeda Morales, Golosón y Juan Manuel Gálvez estarán abiertos al público.

Desde que comenzó la pandemia, como medida de prevención no se permitía que los viajeros entraran acompañados, el ingreso era únicamente para los pasajeros, que debían ser despedidos afuera de la terminal, incluso de prisa para mantener la fluidez de vehículos.

“Tomando en cuenta las disposiciones de Copeco-Sinager para evitar el incremento de casos de covid-19 a nivel nacional, los acompañantes de los viajeros deberán presentar previo a su ingreso el carnet de vacunación con las dosis completas o una prueba de covid-19 negativa, así como usar en todo momento mascarilla”, informó Ehisa por medio de un comunicado de prensa.

Medidas

Al ingresar por la terminal B, los ciudadanos deben aplicarse gel antibacterial y portar la mascarilla. En el Villeda Morales operan unas 11 aerolíneas nacionales e internacionales y tiene un tráfico anual que supera el millón de viajeros, lo que hace que sea uno de los más activos del país.

El comercio ha aumentado en la terminal aérea, que cuenta con áreas de atención al pasajero, y nuevos cafés y restaurantes de comidas se han sumado a las opciones de los usuarios. Cuentan con más de 15 restaurantes y cafés, seis “souvenirs”, tres tiendas, una de marroquinería, servicios electrónicos y de productos varios, 12 rentadoras de carros y dos laboratorios.

La actividad comercial sin duda es uno de los beneficiados con la apertura del aeropuerto, ya que incrementarán sus ventas. “Un gran cambio, mire la cantidad de gente que hay aquí. Antes era muy poquito de personas, las ventas habían bajado bastante”, contó una empleada de un café.

La Asociación de Maleteros, integrada por más de 40 personas que operan en el Villeda, también dijeron estar contentos con las nuevas medidas porque eso les permite generar ingresos con las propinas que reciben por transportar equipajes.