Declaran culpables a dos conductores por tráfico de indocumentados en Texas

Aurelio Barajas Pulido fue hallado culpable de conspirar para transportar indocumentados.

Foto de archivo /EFE

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Texas, Estados Unidos

Dos conductores de camión fueron hallados culpables de cargos de conspiración para transportar extranjeros indocumentados dentro de Estados Unidos en dos incidentes separados registrados en Texas, informó hoy miércoles el Departamento de Justicia (DOJ).

Aurelio Barajas Pulido fue hallado culpable de conspirar para transportar indocumentados por un incidente ocurrido el pasado 8 de febrero cuando intentó pasar un camión por un puesto de control de la Interestatal 35 en Laredo, Texas.

En la inspección secundaria al camión las autoridades hallaron 80 indocumentados escondidos, entre ellos tres menores no acompañados, incluyendo una adolescente embarazada.

En el juicio, la defensa intentó convencer al jurado de que Barajas no sabía que estaba traficando personas indocumentadas. Sin embargo, la fiscalía presentó testigos que lo comprometieron.

Barajas es residente permanente y tras cumplir su condena puede perder el estatus legal y enfrentar una deportación, detalló el DOJ en un comunicado.

En el segundo caso, Roderick DeWayne Chisley fue encontrado culpable de cargos relacionados a un incidente ocurrido el 17 de diciembre de 2021.

En esa fecha, Chisley fue detenido por la Patrulla Fronteriza poco después de pasar por el puesto de control de la Interestatal 35.

Las autoridades habían descubierto que el camión con remolque que conducía Chisley era robado. Durante la inspección encontraron 52 personas indocumentadas en el tráiler.

Chisley admitió que le iban a pagar 50.000 dólares para transportar el camión con remolque de Laredo a San Antonio (Texas).

Al igual que en el caso de Barajas, la defensa intentó convencer al jurado de que Chisley no tenía conocimiento de las 52 personas escondidas en su camión.

El jurado no creyó el argumento de la defensa y encontró a Chisley culpable de los cargos.

Tanto Chisley como Barajas enfrentan hasta 10 años de prisión y una posible multa máxima de 250.000 dólares.

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