Honduras, Nicaragua y Guatemala entre los países más atrasados en innovación y tecnología

Honduras sigue atrapado entre los veinte países (donde también está Guatemala y Nicaragua) que más rezago enfrentan en el mundo en tecnología, infraestructura y capital humano y se muestra como un país débil para enfrentar los retos de una economía global basada en el conocimiento.

En el Índice Global de Innovación 2024: Desbloqueando la Promesa del Emprendimiento Social, publicado recientemente por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), Honduras se ubica en la posición 114, al final de la lista de 133 países evaluados por esa entidad.

Aunque la posición de 2024 es menos crítica comparada con la de 2023 (ocupó el puesto 116), Honduras no logra regresar al escalón 103 que alcanzó en 2020, cuando la pandemia covid-19 empezaba a propagarse por el mundo.

Todos los años, el Índice Global de Innovación (IGI) evalúa siete pilares fundamentales, como instituciones, capital humano e investigación, infraestructura, sofisticación de mercado, sofisticación empresarial, producción de conocimiento y tecnología y producción creativa. En 2024, Honduras ha obtenido puntuaciones bajas en casi todos estos aspectos.

Una de las debilidades señaladas por el informe de OMPI es el bajo desarrollo de infraestructura tecnológica. Honduras ocupa el puesto 114 dentro de la evaluación de este pilar que se traduce en la baja expansión de tecnologías de la información y comunicación (TICs), condición que limita a Honduras a digitalizar su economía.

Según el Índice Global de Innovación 2024: Desbloqueando la Promesa del Emprendimiento Social de la OMPI, el sector empresarial apenas participa en el financiamiento de proyectos de I+D (investigación y desarrollo), es decir, existe una desconexión entre el ámbito privad y el desarrollo de soluciones innovadoras que incrementa la dependencia de tecnologías importadas. Esto, a su vez, afecta la competitividad nacional.

En términos de capital humano, Honduras presenta un panorama poco alentador. El país se ubica en el puesto 99 en la formación de su fuerza laboral en áreas tecnológicas y científicas y muestra un sistema educativo que no está preparando adecuadamente a los futuros trabajadores para los desafíos tecnológicos del siglo XXI.

A nivel regional, Honduras está considerablemente rezagado en comparación con sus vecinos centroamericanos. Costa Rica, por ejemplo, se ubica en el puesto 70 y es el líder en innovación en Centroamérica, con una infraestructura tecnológica avanzada y un ecosistema dinámico de empresas emergentes.

Panamá, que se encuentra en el puesto 82 en el IGI, también muestra un avance significativo porque ha logrado atraer inversiones extranjeras en sectores clave como la tecnología y la logística. De esta manera, ha fortalecido su infraestructura y ha impulsado su capacidad para generar innovación local.

Incluso El Salvador, que históricamente ha enfrentado desafíos económicos, ha logrado avanzar más que Honduras, situándose en el puesto 98. En la última década, el gobierno instauró políticas orientadas a mejorar su infraestructura tecnológica y ha fortalecido la colaboración entre el sector privado y el público para buscar una mejora en la innovación.

Nicaragua, pese a que sigue en los últimos lugares del índice, con el puesto 124, ha mostrado mayor resiliencia en algunos aspectos que Honduras. Esto indica que, aun con sus limitaciones económicas, el país vecino ha logrado mantener una posición competitiva de acuerdo con sus capacidades, mientras Honduras sigue en desventaja en el ranking.

En el istmo centroamericano hay dos grupos de países que avanzan a dos velocidades: Costa Rica, Panamá y El Salvador lo hacen de manera acelerada y Guatemala, Honduras y Nicaragua de una manera lenta que los mantiene en posiciones que solo superan a Etiopía, Mali, Nigeria, Angola, Burundi, Mauritania y otros países africanos.

Carlos Leonardo Paguada, presidente de Blockchain Honduras y director de operaciones globales de Orden Global Corp, considera que, entre otros factores, Honduras “no crece en innovación y tecnología producto de la educación; los centros educativos, los tomadores de decisiones, no han incluido en sus planes de estudios herramientas útiles para que los jóvenes pueden innovar, emprender y desarrollar proyectos tecnológicos”.

“Es necesario que los centros educativos y universidades incluyan más innovación y más tecnología. La Universidad Nacional Pedagógica Francisco Morazán, formadora de formadores, debe ofrecer programas a esta nueva generación de profesionales que formarán a los nuevos estudiantes. En países cercanos, como Costa Rica y El Salvador, el tema blockchain es cotidiano y la realidad virtual es parte de los procesos de enseñanza. Tenemos que invertir en las bases, en la formación de profesionales”, dice Paguada, quien recientemente abrió en Honduras un capítulo de la organización internacional Offchain.

Offchain, con sedes en 74 países, cuenta con la Royal Tech University enfocada en la formación de innovación y tecnología, a la cual pueden acceder jóvenes hondureños por medio de Offchain Honduras.

A nivel global, los países líderes en innovación, como Suiza, Suecia y Estados Unidos, se destacan por sus altos niveles de inversión en I+D, una infraestructura tecnológica avanzada y la existencia de ecosistemas de innovación altamente interconectados. Este grupo ha logrado combinar el talento, la tecnología y las políticas públicas para crear un entorno propicio para la innovación sostenida.

Singapur, que ocupa el cuarto lugar en el IGI, es un ejemplo de cómo una economía pequeña puede sobresalir a nivel mundial en innovación mediante la inversión estratégica en educación y tecnologías avanzadas. La capacidad de esta nación para formar capital humano y adoptar nuevas tecnologías rápidamente lo ha consolidado como un líder en el escenario global.