Roger y Jennifer, un amor que terminó en muerte y cárcel

Se mostraban felices en redes sociales. Roger Enrique Lanza González y Jennifer Alejandra Galdámez tenían varios años casados, pero ella le ocultaba a su familia un secreto que la hacía llorar por las noches.

Jennifer Alejandra Galdámez trabajaba en una aerolínea del aeropuerto Ramón Villeda Morales, a donde supuestamente se dirigía el día que perdió la vida.

El 28 de noviembre de 2021, la Policía acudió a un llamado de un carro abandonado en el segundo anillo de San Pedro Sula, encontrando en él a una mujer muerta. Se supo que se trataba de Jennifer Galdámez.

Roger Lanza llegó a la escena llorando y dijo a la Policía que su mujer había salido a eso de las 4:00 am rumbo a su trabajo. Sin embargo, agentes de la Dirección Policial de Investigación (DPI) comenzaron las indagaciones encontrando incongruencias en lo relatado por Lanza.

Meses después, la investigación implicó a Roger Lanza en el crimen de su esposa. Huyó del país, lo que aumentó las sospechas. La Fiscalía lo acusó y emitió una orden de captura. Enrique Lanza regresó a Honduras y se entregó el 26 de junio de 2023.

Para no ir a juicio, Roger Lanza aceptó los cargos y el 30 de diciembre de 2024 el juez lo declaró culpable del delito de femicidio agravado y lo condenó a 18 años y nueve meses de prisión.

En sus análisis, las autoridades policiales tienen perfilado a Roger Lanza como un psicópata que en su obsesión combinada con celos tomó la decisión de estrangular a Jennifer Alejandra.

La historia de amor había llegado a su fin desde hace mucho tiempo. La familia de Jennifer contó que los planes de ella era mantenerse con él, pero llegó un momento que decía: ‘ya no puedo estar con él. Ya no aguanto’.

Había inestabilidad en el hogar de Jennifer de parte de Roger “por sus trabajos inestables y mujeres que a ella le contaban, y Jennifer no tenía el valor de decirnos a nosotros que por respetar su hogar nos tuvimos muy al límite de eso”, dijeron sus familiares.

Tres días antes del crimen, su familia vio a Jennifer triste, por lo que le dijeron que se separara de Roger, pero ella dijo: “Él me va a buscar donde esté y no me va a dejar en paz”.

La presunción de inocencia del imputado se la quebrantó la Fiscalía de Delitos Contra la Vida en el proceso con base en testimonios y filmaciones que demostraron que Roger Enrique Lanza Gonzales fue a botar el cadáver de su esposa Jennifer después de que la estrangulara en su vivienda.

Los videos obtenidos por la Fiscalía son las pruebas de mayor importancia sobre la implicación de Roger Lanza en el asesinato y que ubicaron a Lanza en la escena del crimen.

Las autoridades policiales recopilaron una secuencia de los movimientos de Lanza captados por cámaras de seguridad privadas y del Sistema Nacional de Emergencia 911 el día que Roger Lanza mató a su esposa.