Perverso hallazgo en celular de la “Banda de Berna”

Las escuchas telefónicas y la extracción de datos de dispositivos móviles están siendo clave en la acusación contra 12 miembros de la organización criminal conocida como la “Banda de Berna”.

Son vinculados con la desaparición y asesinato de José Octavio Méndez y sus 11 escoltas. Estas pruebas, junto con fotografías de masacres, armas y pornografía infantil, incriminan directamente a los detenidos.

El 5 de diciembre, la Unidad Nacional Antisecuestros (Unas) capturó a nueve integrantes de la banda en operativos realizados en La Ceiba, Olanchito y Baracoa.

Entre los arrestados se encuentran Noé Guevara Castellanos, Marvin Javier Banegas Jaén y otros siete, quienes ya enfrentan cargos por asociación para delinquir y permanecen en la cárcel de máxima seguridad de Ilama, Santa Bárbara.

La investigación apunta a que algunos de los acusados proporcionaron armas y logística, mientras que otros participaron directamente en los asesinatos, o bien jugaron el papel de informantes.

En uno de los teléfonos móviles incautados a los integrantes de la “Banda de Berna” se encontraron múltiples elementos incriminatorios que vinculan a los sospechosos con diversos actos delictivos. Entre las pruebas más reveladoras están las conversaciones que sostuvieron los detenidos, en las que mencionan con detalle la planificación y ejecución de actividades criminales, incluidas masacres y secuestros en la región de Baracoa y El Ramal del Tigre, en Tela.

Estas comunicaciones muestran cómo los integrantes coordinaban la logística, el suministro de armas, la vigilancia y los movimientos de sus víctimas, dejando evidencia de su participación en los crímenes investigados. Con estas capturas, el Ministerio Público busca librar órdenes de detención contra 12 sospechosos más, elevando el total de implicados a 35.

Además de los mensajes, los dispositivos contenían más de 400 fotografías que documentan armas de alto calibre y contenido explícito de pornografía infantil. También se hallaron imágenes de las masacres perpetradas en la zona, algunas de las cuales muestran escenas gráficas de violencia que refuerzan la implicación de los acusados en estos actos.

Los datos revelan que la “Banda de Berna”, liderada por José Bernabé Acevedo, alias “Berna”, operaba en Baracoa y El Ramal del Tigre, zonas donde ocurrieron varias masacres.

Sin embargo, el cabecilla fue asesinado el 10 de octubre junto con dos de sus colaboradores, lo que dejó a la estructura criminal debilitada.

Entre los prófugos se encuentra el expolicía Carlos Núñez Vega, alias “Caluy”, identificado como el segundo al mando de la banda. La Policía ha intensificado los operativos para su captura y ofrece una recompensa de 200,000 lempiras por información que conduzca a su paradero.

Las autoridades señalaron que aún quedan pendientes órdenes de captura contra varios implicados, mientras los tribunales ya procesan a 23 miembros de la organización.