“Era un déspota, desgraciadamente ella estaba enamorada de él”

“Ya estamos más tranquilos porque no es como dijo él, que era un suicidio”. Así reaccionó Luz Ferrera tras conocer sobre la captura de Assad Dane Johnson (de 42 años) acusado del asesinato de su esposa Alma Aideé Ferrera.

“Es bueno saber que este caso no está quedando impune”, agregó Luz, hermana de la ahora occisa.

Assad Johnson, un operario de máquinas, originario de Balfate, Colón, fue detenido el domingo en la casa donde vivía con su esposa en la colonia San Rafael del sector Satuyé de La Ceiba.

Ayer se llevó a cabo la audiencia de declaración de imputado en donde un juez de letras en materia penal le dictó detención judicial y fue trasladado al centro penal ceibeño.

La audiencia inicial está programada para mañana miércoles. La doctora Alma Ferrera fue encontrada sin vida el pasado 2 de abril en la habitación de su casa, ubicada en la colonia San Rafael.

Según el testimonio de Assad Dane Johnson, su compañera de hogar se habría colgado con una soga. En un intento por salvarle la vida la doctora fue trasladada a un hospital en donde la declararon muerta al llegar.

El informe preliminar de los doctores que la atendieron establece que Alma Ferrera murió por asfixia mecánica y que tenía hematomas en diferentes partes del cuerpo. Assad Johnson fue retenido por la Policía para tomarle declaración por lo sucedido ese 2 de abril, horas después fue dejado en libertad.

La declaración del acusado contrasta con las investigaciones de la Dirección Policial de Investigación (DPI) que manifiesta que el sospechoso entró a su casa de habitación y comenzó a discutir con su compañera de hogar.

Luego el ahora detenido encendió el televisor a volumen alto y siguió discutiendo, horas más tarde un familiar encontró a la víctima colgada en un tendedero de ropa.

Al analizar las incongruencias en la declaración del acusado, los agentes encargados de la investigación solicitaron el dictamen final de la autopsia y se pudo confirmar que la muerte de la mujer fue de manera homicida.

Con las pruebas que lo imputaban, el Juzgado de Letras de La Ceiba le giró una orden de captura el 2 de junio.

Salomón Ferrera, padre de la doctora Ferrera, dijo que su yerno constantemente maltrataba físicamente a su hija.

“Era un déspota, desgraciadamente ella estaba enamorada de él. Era posesivo, ya la había golpeado, ella me dijo; pero que no quiso denunciarlo para que no pasara a más”, agregó.