Viruela del mono: ¿por qué aterroriza al mundo?

La viruela del mono es una enfermedad poco frecuente que afecta principalmente a roedores, como ratas y ratones, así como a primates no humanos, incluidos los monos. Sin embargo, este virus también puede infectar a las personas.

En los últimos años, la pandemia de COVID-19 ha transformado nuestra percepción sobre los virus, generando incertidumbre y miedo, lo que nos ha llevado a estar más alertas ante la aparición de nuevas enfermedades.

Recientemente, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom, declaró nuevamente la emergencia sanitaria mundial por la viruela símica, también conocida como viruela del mono.

La primera emergencia fue declarada en 2022, tras un brote significativo registrado en África.

En noviembre de 2022, la OMS anunció su preferencia por el término “mpox”, una abreviatura del nombre original en inglés “monkeypox”, como sinónimo de la enfermedad conocida como viruela del mono.

Hasta ahora, la República Democrática del Congo ha reportado la mayor cantidad de casos de viruela del mono, con más de 15,664 infecciones y 548 muertes registradas.

Desde el 1 de enero de 2022 hasta el 2 de agosto de 2024, se han confirmado 99,176 casos de viruela del simio (Mpox) en 116 países, según datos de laboratorio.

Los países que han reportado casos de este virus incluyen Estados Unidos, Brasil, España, Francia, Colombia, México, Reino Unido, Perú, Alemania y la República Democrática del Congo.

El 96.4% de los casos se han presentado en hombres, con una mediana de edad de 34 años.

Fuentes del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de África han indicado que casi el 70% de los casos en el Congo se presentan en niños menores de 15 años, quienes también representan el 85% de las muertes.

En aquel entonces, el nivel de emergencia internacional fue desactivado diez meses después. Aunque los países occidentales lograron frenar en gran medida la propagación del mpox mediante vacunas y tratamientos, estos recursos han sido escasos en África.