¿Para qué van a soltar 84 millones de moscas en Honduras?

Honduras está en emergencia sanitaria debido a la propagación del gusano barrenedor que afecta el ganado. Desde que se declaró la emergencia se disponen de 49 cámaras de dispersión terrestre, corrales de inspección en zonas fronterizas y siete puestos de control.

A la fecha, Honduras es uno de los países con menos casos de esta enfermedad en Centroamérica; sin embargo, las autoridades hacen un enérgico llamado a los productores a que intensifiquen las medidas de prevención y la vigilancia del ganado.

Actualmente, son 38 casos del gusano barrenador que se registran en el territorio en especies bovinas, porcinas y equinas de los departamentos de El Paraíso, Olancho, Choluteca, Cortés y Santa Bárbara.

Como una de las estrategias para frenar el avance de la plaga del gusano barrenador del ganado en Honduras, las autoridades de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG) inauguraron el centro de eclosión y dispersión de moscas estériles.

Este es el primer centro de este tipo en el país y en la región Centroamérica, y tiene por objetivo la crianza de unas 50 millones de pupas estériles a la semana, que luego serán propagadas en las fronteras hondureñas para contener la reproducción de la mosca que contiene la plaga del gusano barrenador.

Las autoridades estiman liberar unas 84 millones moscas estériles en las fronteras hondureñas con Nicaragua y Guatemala. La técnica del insecto estéril es un método para controlar plagas de insectos, como la mosca del gusano barrenador, consiste en liberar insectos estériles en una zona infestada; se crían en masa los insectos que causan la plaga y se esterilizan con radiación.

Al cumplir el ciclo se liberan los insectos estériles en las zonas afectadas, donde compiten con los insectos portadores por aparearse con las hembras; al aparearse con los insectos estériles, las hembras no producen descendencia, lo que reduce la población de la plaga.

El centro recibirá las pupas desde la planta de producción en Panamá para continuar con el ciclo de vida de insecto hasta que se conviertan en moscas que luego serán liberadas en las zonas fronterizas del país vía aérea. Esta técnica interrumpe el ciclo reproductivo de la plaga.

Desde que se conoció el primer caso de la enfermedad del gusano barrenador en Panamá se comenzaron las acciones para frenar su avance, a la fecha en la región centroamericana se han dispersado 5,145 millones de moscas estériles, desde Panamá hasta Honduras. Foto de Costa Rica, también afectada con la plaga.

La enfermedad es causada por las larvas de la mosca del gusano barrenador; las larvas se alimentan del tejido vivo de los mamíferos, incluyendo a los seres humanos, que pueden sufrir lesiones graves en la piel.

Desde el aeropuerto Palmerola se harán hasta tres vuelos diarios para dispersar el insecto estéril en las diferentes zonas. La erradicación del gusano barrenador tendrá un impacto económico positivo en el país y la región, reduciendo las perdidas en el sector ganadero.