De goleador a tener una farmacia y vivir un calvario: Está casi inválido

Destacado exgoleador ahora es farmacéutico y vive una pesadilla al extremo de estar casi inválido.

Jonas Gonçalves Oliveira fue un gran goleador en su etapa como futbolista, militó en clubes como Benfica, Valencia, Gremio, entre otros equipos.

Jonas hoy cuenta con 40 años de edad y ha impactado al revelar el calvario que está sufriendo.

Jonas terminó su carrera en julio de 2019 en el SL Benfica de Portugal, consagrándose como uno de los grandes goleadores del club.

El brasileño tuvo un enorme paso en el Valencia en donde se le recuerda con mucho cariño.

La historia Jonas Gonçalves no deja a nadie indiferente. El exfutbolista brasileño nacido en Bebedouro en 1984 ha vivido una transformación profunda desde que colgó las botas.

El destino y las lesiones le llevaron a poner fin a su carrera deportiva y tomar un camino totalmente diferente y apartado del deporte.

Actualmente, Jonas lleva una vida distinta como dueño de una farmacia en su ciudad natal, Taiúva, un pequeño municipio en el estado de São Paulo.

En el canal de YouTube Cartoloucos, ha narrado cómo es su nueva vida desde que se trasladó a Taiúva y cómo ha sido su transición del fútbol a la vida cotidiana

“Por los problemas de lesiones, para mí no fue tan difícil. Hubo un año en el que me puse 42 inyecciones de Voltaren. Aquí es donde todo se corroe desde dentro...”, comenzó diciendo Jonas.

Jonas confesó que no puede mantenerse de pie más de 40 minutos o una hora, y que el miedo a las secuelas a largo plazo del fútbol sigue presente en su vida.

Esos problemas le han llevado a tener muchas dificultades para llevar actualmente una vida normal por los dolores que tiene.

“Sobre todo la columna, porque hoy no puedo estar de pie más de 40 minutos, una hora”, indicó Jonas.

No obstante, Gonçalves admitió que en su cabeza siempre están presentes las importantes secuelas que le ha dejado su carrera como futbolista profesional.

Jonas ha optado por una existencia en equilibrio, combinando sus habilidades para los negocios con su deseo de contribuir a su comunidad.

“Un año me pusieron 42 inyecciones, hoy no aguanto 40 minutos de pie”, confesó Jonas.