La historia del hijo “falso” de Vicente Fernández

Retirado de los escenarios desde 2006, el cantante Vicente Fernández falleció este domingo a los 81 años en Guadalajara, el mismo día que los mexicanos honran a su patrona, la Virgen de Guadalupe, con rezos y mariachis, de los cuales “Chente” era el rey.

Partió tras permanecer hospitalizado casi cinco meses por una caída en su rancho Los Tres Potrillos -como llamaba a sus hijos varones-, en Guadalajara.

Pero al Charro no solo se le conoció por su prolífica carrera en la música ranchera, sino también por algunos escándalos y supuestas infidelidades a su esposa, Doña Cuquita.

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Chente y su esposa tuvieron tres hijos: Vicente Jr., Alejandro y Gerardo. Los tres fueron su gran orgullo y por eso nombró su rancho en Huentitán, Jalisco como “Los Tres Potrillos”.

A su familia se sumó una cuarta hija, se trata de Alejandra, que en realidad es hija de la cuñada de Chente, pero a quien crió como una hija.

El hijo impostor

En 1992, Vicente Fernández se vio envuelto en un escándalo cuando la actriz Patricia Rivera, con quien había filmado la película “El Arracadas”, reveló que ella había dado a luz a un hijo de Chente.

Patricia Rivera dijo por años que Pablo Rodrigo era un Fernández.

En una entrevista que Chente concedió al programa “Historias para contar”, contó que su supuesto hijo lo había demandado por $5.5 millones y el día que lo conoció, le anunciaron que el joven y su madre le querían embargar, caballos, autos y su rancho “Los Tres Potrillos”.

El artista llegó a un acuerdo con el muchacho y le ofreció $4 millones para que abriera una oficina, después de que finalizara sus estudios.

Doña Cuquita, esposa de Vicente, aceptó al joven, integrándolo como uno más de sus hijos.

Sin embargo, en 2007, Vicente Fernández se dio cuenta que Pablo Rodrigo no era su hijo.

En ese año, Chente intentó sacar un seguro antisecuestros, luego de que su hijo mayor, Vicente Jr., fuera secuestrado en 1998 y le mutilaran dos dedos.

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A todos les pidieron muestras de sangre y ahí se dieron cuenta que Rodrigo no tenía filiación de ADN con Chente, según contó el mismo al periodista Gustavo Adolfo Infante.

“Luego del secuestro de Vicente (su hijo) le íbamos a sacar un seguro antisecuestro, para lo cual le sacaron sangre, por aquello de si te mandan un dedo, sepas si realmente es de tu hijo o no. Ahí fue donde detectamos que no era mi hijo”, contó Vicente Fernández en una entrevista con Gustavo Adolfo Infante

Cuando le consultaron si le dolió enterarse de que el joven no era su hijo, Chente respondió: “Claro que me duele, después de 18 años me dicen que no es mío”.

Don Vicente cortó más tarde toda su relación con el joven.

Con información de Telemundo.