San Pedro Sula, Honduras.
Un total de 536 privados de libertad fueron trasladados este lunes desde el Centro Penal Sampedrano a diferentes cárceles del país, como parte del proceso de reorganización del sistema carcelario de Honduras.
El operativo comenzó antes de las 6:00 am con la presencia de camiones militares, patrullas y un fuerte contingente militar. Además generó el cierre de varias calles que dan acceso al recinto sampedrano.
El traslado provocó mucho movimiento en las afueras y en el interior del presidio. Los familiares salían con las pertenencias de los presos, pero algunos no lograron ingresar y exigían información sobre el nuevo lugar donde sus familiares serían reubicados.
Fotos: Imágenes del traslado de los 536 privados de libertad
Durante casi cinco horas, el operativo se desarrolló con normalidad, pero cerca dfel mediodía una columna de humo, al parecer causada por un incendio, generó la consternación de los familiares que seguían a la espera.
Los movimientos de los militares y la llegada de varias unidades de bomberos aumentaron la tensión en el recinto en donde van a permanecer 1,500 privados de libertad que serán trasladados a finales de este mes o a principios de octubre.
Tras el retorno de la calma, ya en las horas de la tarde, las autoridades confirmaron que 94 mujeres fueron enviadas al PNFAS en Támara, 10 a El Progreso, 120 a Choluteca, 10 a Nacaome, 50 a La Paz, 50 a Juticalpa, 25 de El Progreso al Pozo II en Morocelí, 87 al Pozo II, 12 a El Pozo en Ilama, 10 a El Progreso, 50 a Gracias a Dios y 18 a la Penitenciaría Nacional de Támara.
En total fueron trasladados 536 internos, de ellos 511 fueron reubicados desde San Pedro Sula y 25 desde El Progreso.
Con la reubicación de internos, el Centro Penal Sampedrano cumple sus últimos días de operación, ya que según el presidente Juan Orlando Hernández, el mismo será demolido en menos de un mes.
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Han pasado 67 años desde que se levantaron las primeras paredes que tuvieron como inquilinos a narcotraficantes, secuestradores, robacarros, pandilleros, violadores, asaltantes y personas que cometieron delitos menores.
La noticia que el penal quedará vacío y que los presos serán trasladados a otras cárceles a partir de hoy ha trascendido generando un ambiente de incertidumbre y preocupación entre los internos y familiares.
Ayer fue un domingo de intensa actividad; contrario a otros días de visita llegaron madres con hijos y hasta familias completas. Según las autoridades del penal entraron más de 3,000 personas como visitas. “Ellos saben que se irán de este penal y han traído a sus hijos para que se despidan”, dice uno de los internos.
