Tegucigalpa, Honduras.
Ninguna de las partes involucradas en el conflicto en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah) cede a sus posiciones, lo que podría desencadenar en repercusiones.
Los estudiantes podrían perder el periodo en las diferentes unidades académicas, tal como ocurrió en el Centro Universitario Regional del Litoral Pacífico (CURLP).
Hace más de cuatro semanas que miembros del Movimiento Estudiantil Universitario (MEU) iniciaron las protestas en demanda de la renuncia de la rectora Julieta Castellanos, al igual que de las distintas autoridades de la Unah.
Las manifestaciones se han agudizado en los últimos días, al grado de terminar en actos violentos y batallas campales.
Suspenden clases
Para evitar mayores problemas, las autoridades universitarias determinaron suspender ayer las actividades académicas.
En la Ciudad Universitaria permanecieron pequeños grupos de encapuchados, los que en su mayoría se ubican en la entrada principal.
La mayoría de edificios permanecieron tomados, a excepción de la Facultad de Ciencias Jurídicas.
Los manifestantes colocaron sillas y mesas en la Vicerrectoría de Orientación y Asuntos Estudiantiles (Voae).
A raíz de esas acciones, las autoridades de la Unah dieron a conocer a través de un comunicado que “debido a los hechos ocurridos, donde los accesos a las oficinas administrativas a la Voae fueron cerrados por estudiantes militantes del MEU, el pago de las becas correspondientes a mayo y junio quedó suspendido hasta nuevo aviso, al igual que todos aquellos trámites pertinentes a esta dependencia”.
Crisis
Julieta Castellanos, rectora de la Unah, está consciente de que hay problemas “no resueltos”, entre ellos el de la representación estudiantil, el que considera que “no depende de solo nosotros”, sino que para resolverlo debe haber un reglamento electoral, lo que es una urgencia de los estudiantes que tienen que solucionar y que es lo que reclamaban originalmente.
“A esta altura ellos (los manifestantes) no quieren elecciones. Yo supongo que el MEU no quiere elecciones”.
Contó que han presentado una propuesta, la cual llevarán este día al Congreso Nacional, donde lo que plantean es que cinco estudiantes integren la junta de transición de la universidad, uno miembro del sindicato, uno de la Adunah y otro del sector docente.
“Yo no sé quiénes son los que elaboran esas propuestas, dicen que son unos profesores de ciencias políticas y sociales, es probable que sea en conjunto y que quieran controlar la universidad sin concursar siquiera para una plaza. “Ahora van con otro tema que no es el que originalmente planteaban, que eran las normas académicas, que fue lo que generó la problemática el año pasado, pero eso ahora ni lo mencionan”, reiteró Castellanos.
La rectora considera que las acciones de protesta en la Unah van más allá, “porque los estudiantes no están pensando en las normas académicas ni en las elecciones estudiantiles”, pues los organismos de derechos humanos les llevan comida todas las noches a los que están en huelga.
En cuanto a la petición de que renuncie, Castellanos aseguró que su periodo lo termina el 25 de septiembre, “entonces, ese es todo un proceso”.
Hay que recordar que todavía no está nombrada la Junta de Dirección Universitaria (JDU), porque aún están recibiendo los currículos.
La JDU debe nombrar el nuevo rector en agosto y debió estar integrada en mayo, pero el Consejo Universitario amplió por dos meses su periodo.
Guillermo Arturo Caballero, presidente del Claustro de Profesores de la Facultad de Ciencias Jurídicas, dijo que el conflicto se ha agudizado porque hay “posturas extremas”, pero al final hay conciencia de que se tiene que resolver.
“Mientras el problema esté en manos de las personas con la conciencia y la madurez que se pueda solucionar, creo que vamos a encontrar un equilibrio para llevarlo a cabo”, agregó Caballero.
Ninguna de las partes involucradas en el conflicto en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah) cede a sus posiciones, lo que podría desencadenar en repercusiones.
Los estudiantes podrían perder el periodo en las diferentes unidades académicas, tal como ocurrió en el Centro Universitario Regional del Litoral Pacífico (CURLP).
Hace más de cuatro semanas que miembros del Movimiento Estudiantil Universitario (MEU) iniciaron las protestas en demanda de la renuncia de la rectora Julieta Castellanos, al igual que de las distintas autoridades de la Unah.
Las manifestaciones se han agudizado en los últimos días, al grado de terminar en actos violentos y batallas campales.
| Al menos cuatro estudiantes permanecen en huelga de hambre en la entrada principal.
|
Para evitar mayores problemas, las autoridades universitarias determinaron suspender ayer las actividades académicas.
En la Ciudad Universitaria permanecieron pequeños grupos de encapuchados, los que en su mayoría se ubican en la entrada principal.
La mayoría de edificios permanecieron tomados, a excepción de la Facultad de Ciencias Jurídicas.
Los manifestantes colocaron sillas y mesas en la Vicerrectoría de Orientación y Asuntos Estudiantiles (Voae).
A raíz de esas acciones, las autoridades de la Unah dieron a conocer a través de un comunicado que “debido a los hechos ocurridos, donde los accesos a las oficinas administrativas a la Voae fueron cerrados por estudiantes militantes del MEU, el pago de las becas correspondientes a mayo y junio quedó suspendido hasta nuevo aviso, al igual que todos aquellos trámites pertinentes a esta dependencia”.
| Guardias quitan los obstáculos que estaban en las calles internas de la Unah.
|
Julieta Castellanos, rectora de la Unah, está consciente de que hay problemas “no resueltos”, entre ellos el de la representación estudiantil, el que considera que “no depende de solo nosotros”, sino que para resolverlo debe haber un reglamento electoral, lo que es una urgencia de los estudiantes que tienen que solucionar y que es lo que reclamaban originalmente.
| Megamarcha
Para este día, los estudiantes han planificado desarrollar una marcha, la que iniciará en la Unah y concluirá en el Congreso Nacional, pues han programado entregar a los diputados la propuesta para integrar una junta de transición en la máxima casa de estudios.
|
Contó que han presentado una propuesta, la cual llevarán este día al Congreso Nacional, donde lo que plantean es que cinco estudiantes integren la junta de transición de la universidad, uno miembro del sindicato, uno de la Adunah y otro del sector docente.
“Yo no sé quiénes son los que elaboran esas propuestas, dicen que son unos profesores de ciencias políticas y sociales, es probable que sea en conjunto y que quieran controlar la universidad sin concursar siquiera para una plaza. “Ahora van con otro tema que no es el que originalmente planteaban, que eran las normas académicas, que fue lo que generó la problemática el año pasado, pero eso ahora ni lo mencionan”, reiteró Castellanos.
La rectora considera que las acciones de protesta en la Unah van más allá, “porque los estudiantes no están pensando en las normas académicas ni en las elecciones estudiantiles”, pues los organismos de derechos humanos les llevan comida todas las noches a los que están en huelga.
En cuanto a la petición de que renuncie, Castellanos aseguró que su periodo lo termina el 25 de septiembre, “entonces, ese es todo un proceso”.
Hay que recordar que todavía no está nombrada la Junta de Dirección Universitaria (JDU), porque aún están recibiendo los currículos.
La JDU debe nombrar el nuevo rector en agosto y debió estar integrada en mayo, pero el Consejo Universitario amplió por dos meses su periodo.
Guillermo Arturo Caballero, presidente del Claustro de Profesores de la Facultad de Ciencias Jurídicas, dijo que el conflicto se ha agudizado porque hay “posturas extremas”, pero al final hay conciencia de que se tiene que resolver.
“Mientras el problema esté en manos de las personas con la conciencia y la madurez que se pueda solucionar, creo que vamos a encontrar un equilibrio para llevarlo a cabo”, agregó Caballero.
