Tegucigalpa, Honduras.
Un plan para perpetrar un atentado criminal, esta vez contra el pastor Alberto Solórzano, presidente de la Confraternidad Evangélica de Honduras (CEH) y miembro de la Comisión Especial de Depuración de la Policía Nacional, salió a luz ayer al trascender los detalles.
Aparentemente la acción criminal también estaba dirigida a oficiales activos y otros líderes evangélicos de una iglesia ubicada en las cercanías de residencial El Trapiche, al oriente de la capital, justamente donde funciona el Centro Cristiano Internacional (CCI), del cual Solórzano es pastor general.
Los detalles de la trama criminal fueron proporcionados por un informante anónimo a través de un audio que primeramente llegó a manos del líder cristiano y luego a los demás miembros de la Comisión y de las máximas autoridades de la Secretaría de Seguridad, según conoció LA PRENSA.
Solórzano y su familia salieron de Honduras desde hace algunos días con motivo de las fiestas de Navidad y ya se encontraba fuera del país cuando fue notificado del presunto plan para atentar contra su vida, de hecho, la información la recibió la noche del pasado martes.
Esta información sale a luz justamente a 13 días del ataque contra Jorge Machado, asesor técnico de la Comisión de Depuración y director ejecutivo de la Confraternidad Evangélica de Honduras, hecho en el que resultó muerto uno de sus escoltas y otro salió gravemente herido.
Machado y toda su familia salieron del país el pasado viernes 23 de diciembre como una medida de seguridad.
En la grabación, el informante señala que detrás del atentado está un comisionado activo de la institución policial que está involucrado con el crimen organizado y pandilleros de la mara Salvatrucha, incluyendo uno de los líderes de esta organización criminal.
Según esta persona, el plan consistía en sobornar con una fuerte suma de dinero a miembros de la seguridad de Solórzano para que estos se encargaran de materializar el asesinato y evitar así un montón de muertos durante la operación.
A los sicarios se “les pagaría bien” y se les facilitarían vehículos y otros medios logísticos para que pudiesen huir del país.
“No podemos entrar nosotros, tienen que hacerlo ellos mismos (los guardaespaldas), les vamos a pagar bien si lo hacen ellos, porque pueden huir, solo les ponemos las camionetas allá en tal lugar, solo que se monten y se van. Tienen que ser ellos mismos para que no hayan muertos, solo él”, relata el informante al referirse a una plática entre los criminales.
Vigilancia
Una fuente de seguridad que pidió el anonimato confió a este diario que el crimen se planificó desde la Penitenciaría Nacional y ya estaba en marcha.
De hecho , LA PRENSA conoció que en las últimas semanas, varias camionetas y pick-ups han venido rondando la residencia del pastor Solórzano y han ofrecido dinero a niños de los alrededores para que les den información de los días en los que el pastor y su familia llegan al lugar. No obstante, la vivienda se encuentra alquilada casi desde que el líder religioso asumió sus funciones como depurador de la Policía.
En vista de esta situación, ayer mismo se desplazó un equipo de seguridad e inteligencia del Estado para hacer las investigaciones de rigor.
Investigan
Luego de conocerse estas nuevas amenazas contra los depuradores, la Secretaría de Seguridad emitió un comunicado en el que no confirmó el plan criminal, pero aseguró que está bajo investigación.
Citando al ministro de Seguridad, Julián Pacheco, el oficio indica que la obligación es minimizar los riesgos y brindar seguridad en amplios espectros a los miembros de la Comisión de Depuración y sus familias.
Señaló que el supuesto plan se conoció en las últimas horas a través de una denuncia que es investigada por la inteligencia estatal. “Hay instrucciones y ya se iniciaron las investigaciones sobre la denuncia, por el momento no se puede descartar ni confirmar la información relacionada al caso”.
Un plan para perpetrar un atentado criminal, esta vez contra el pastor Alberto Solórzano, presidente de la Confraternidad Evangélica de Honduras (CEH) y miembro de la Comisión Especial de Depuración de la Policía Nacional, salió a luz ayer al trascender los detalles.
Aparentemente la acción criminal también estaba dirigida a oficiales activos y otros líderes evangélicos de una iglesia ubicada en las cercanías de residencial El Trapiche, al oriente de la capital, justamente donde funciona el Centro Cristiano Internacional (CCI), del cual Solórzano es pastor general.
Los detalles de la trama criminal fueron proporcionados por un informante anónimo a través de un audio que primeramente llegó a manos del líder cristiano y luego a los demás miembros de la Comisión y de las máximas autoridades de la Secretaría de Seguridad, según conoció LA PRENSA.
Solórzano y su familia salieron de Honduras desde hace algunos días con motivo de las fiestas de Navidad y ya se encontraba fuera del país cuando fue notificado del presunto plan para atentar contra su vida, de hecho, la información la recibió la noche del pasado martes.
Esta información sale a luz justamente a 13 días del ataque contra Jorge Machado, asesor técnico de la Comisión de Depuración y director ejecutivo de la Confraternidad Evangélica de Honduras, hecho en el que resultó muerto uno de sus escoltas y otro salió gravemente herido.
Machado y toda su familia salieron del país el pasado viernes 23 de diciembre como una medida de seguridad.
En la grabación, el informante señala que detrás del atentado está un comisionado activo de la institución policial que está involucrado con el crimen organizado y pandilleros de la mara Salvatrucha, incluyendo uno de los líderes de esta organización criminal.
Según esta persona, el plan consistía en sobornar con una fuerte suma de dinero a miembros de la seguridad de Solórzano para que estos se encargaran de materializar el asesinato y evitar así un montón de muertos durante la operación.
A los sicarios se “les pagaría bien” y se les facilitarían vehículos y otros medios logísticos para que pudiesen huir del país.
“No podemos entrar nosotros, tienen que hacerlo ellos mismos (los guardaespaldas), les vamos a pagar bien si lo hacen ellos, porque pueden huir, solo les ponemos las camionetas allá en tal lugar, solo que se monten y se van. Tienen que ser ellos mismos para que no hayan muertos, solo él”, relata el informante al referirse a una plática entre los criminales.
Vigilancia
Una fuente de seguridad que pidió el anonimato confió a este diario que el crimen se planificó desde la Penitenciaría Nacional y ya estaba en marcha.
De hecho , LA PRENSA conoció que en las últimas semanas, varias camionetas y pick-ups han venido rondando la residencia del pastor Solórzano y han ofrecido dinero a niños de los alrededores para que les den información de los días en los que el pastor y su familia llegan al lugar. No obstante, la vivienda se encuentra alquilada casi desde que el líder religioso asumió sus funciones como depurador de la Policía.
En vista de esta situación, ayer mismo se desplazó un equipo de seguridad e inteligencia del Estado para hacer las investigaciones de rigor.
Investigan
Luego de conocerse estas nuevas amenazas contra los depuradores, la Secretaría de Seguridad emitió un comunicado en el que no confirmó el plan criminal, pero aseguró que está bajo investigación.
Citando al ministro de Seguridad, Julián Pacheco, el oficio indica que la obligación es minimizar los riesgos y brindar seguridad en amplios espectros a los miembros de la Comisión de Depuración y sus familias.
Señaló que el supuesto plan se conoció en las últimas horas a través de una denuncia que es investigada por la inteligencia estatal. “Hay instrucciones y ya se iniciaron las investigaciones sobre la denuncia, por el momento no se puede descartar ni confirmar la información relacionada al caso”.
