Belkis Aguilar una doctora sampedrana conmovió las redes sociales luego de demostrar la vocación que lleva en las venas por su carrera. Esta hondureña junto a un equipo de voluntarios llevaron vacunas contra el Covid-19 a la olvidada comunidad de Pimienta, aldea de Nueva Esperanza, Intibucá.
Para llegar al lugar se necesitan uno 25 minutos en motocicleta, luego se debe cruzar un puente de más de 50 metros de largo y por último, hay que caminar alrededor de una hora y 30 minutos.
La doctora, dos enfermeros auxiliares, dos promotores y una persona encargada del aseo decidieron emprender este viaje a pesar de las vicisitudes que implica con el único propósito de ayudar. Pues las inundaciones han dañado seriamente el puente.
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Sujetados a dos manos de lo que queda del puente producto de las inundaciones y aferrados al deseo de servir a la comunidad lograron llegar y no solo eso, ejecutaron una gran labor con la mejor actitud.
“Al llegar y ver reunidos a todos nos dio enorme satisfacción. Vacunamos, tomamos citologías, llevamos vitamina A y captamos sintomáticos respiratorios. Lo hacemos por la pasión a la profesión y porque valoramos el esfuerzo que también los pobladores realizan en estas comunidades. Atendimos a madres de familia, niños y adultos mayores”, dijo Aguilar.
Servir en el campo a los más necesitados y llevar la medicina a aquellos que no tienen acceso, es la labor que más disfruta la galena sampedrana.
“En estas situaciones es cuando me doy cuenta que disfruto lo que hago, que el trabajo en el campo o en la montaña es bonito, algo totalmente diferente a lo que experimentamos en la ciudad. La Gloria sea siempre para El Señor, pues, es quién me guía y pone la gracia en mi para poder servir a mi gente”, concluyó.
