Caracas, Venezuela.
Nicolás Maduro se refugia bajo el brazo protector de las Fuerzas Armadas venezolanas, que ayer prometieron defender la elección de la Asamblea Constituyente y le reafirmaron su lealtad frente a las amenazas de Estados Unidos de imponer sanciones económicas si persiste en ese proyecto.
Al repudiar las advertencias del mandatario Donald Trump, el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino López, dijo que la Fuerza Armada reconoce el “carácter legítimo” de la Constituyente, que según la oposición venezolana busca perpetuar al chavismo en el poder y convertir a Venezuela en “otra Cuba”.
“Por ello los soldados se desplegarán el 30 de julio a lo largo y ancho del territorio nacional (...) para garantizar el pleno ejercicio del derecho al voto por parte de todos los venezolanos”, aseguró el ministro en una declaración pública junto al alto mando militar.
Padrino López tildó de “cobarde y vil” la amenaza de Trump, el pasado lunes, de que “tomará fuertes y rápidas acciones económicas” contra el gobierno venezolano si Maduro insiste en
instalar la Constituyente.
Los militares representan el principal sostén del presidente venezolano, quien les ha otorgado gran poder político y económico, y cuya gestión rechazan siete de cada diez ciudadanos, según la firma Datanálisis.
Padrino López, una suerte de “superministro” a quien responden los demás miembros del gabinete, enfatizó que frente a las presiones externas “nos van a conseguir (encontrar) firmes”.
Hora Cero
Por su parte, la oposición reunida en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) presentó ayer un “acuerdo de gobernabilidad”, que espera establecer una vez que Maduro, salga del poder.
“Logrado el cambio y superado el actual régimen, el liderazgo democrático asume el compromiso de asegurar la gobernabilidad mediante la conformación de un gobierno de unión”, explicó el diputado Henry Ramos Allup.
En este acuerdo, en el que se apuesta a la “ justicia social” la MUD se compromete a atender, en primer lugar, “la aplicación de un plan de acción inmediata a la crisis humanitaria”. Asimismo, se aseguró que el “Gobierno de Unidad” abordará la inseguridad y la “delincuencia en el país desarmando y desarticulando a los grupos paramilitares”.
Entretanto, los venezolanos están convocados hoy a un “paro cívico” de 24 horas impulsado por la oposición. El llamado fue rechazado por el ministro de Trabajo, Néstor Ovalles, que amenazó con sancionar a las empresas que se unan a la huelga.
Nicolás Maduro se refugia bajo el brazo protector de las Fuerzas Armadas venezolanas, que ayer prometieron defender la elección de la Asamblea Constituyente y le reafirmaron su lealtad frente a las amenazas de Estados Unidos de imponer sanciones económicas si persiste en ese proyecto.
Al repudiar las advertencias del mandatario Donald Trump, el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino López, dijo que la Fuerza Armada reconoce el “carácter legítimo” de la Constituyente, que según la oposición venezolana busca perpetuar al chavismo en el poder y convertir a Venezuela en “otra Cuba”.
“Por ello los soldados se desplegarán el 30 de julio a lo largo y ancho del territorio nacional (...) para garantizar el pleno ejercicio del derecho al voto por parte de todos los venezolanos”, aseguró el ministro en una declaración pública junto al alto mando militar.
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Personas detenidas
Desde el inicio, el pasado 1 de abril, de la ola de manifestaciones en contra del Gobierno de Maduro, más de cuatro mil personas han sido arrestadas por las fuerzas de seguridad.
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Los militares representan el principal sostén del presidente venezolano, quien les ha otorgado gran poder político y económico, y cuya gestión rechazan siete de cada diez ciudadanos, según la firma Datanálisis.
Padrino López, una suerte de “superministro” a quien responden los demás miembros del gabinete, enfatizó que frente a las presiones externas “nos van a conseguir (encontrar) firmes”.
Hora Cero
Por su parte, la oposición reunida en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) presentó ayer un “acuerdo de gobernabilidad”, que espera establecer una vez que Maduro, salga del poder.
“Logrado el cambio y superado el actual régimen, el liderazgo democrático asume el compromiso de asegurar la gobernabilidad mediante la conformación de un gobierno de unión”, explicó el diputado Henry Ramos Allup.
En este acuerdo, en el que se apuesta a la “ justicia social” la MUD se compromete a atender, en primer lugar, “la aplicación de un plan de acción inmediata a la crisis humanitaria”. Asimismo, se aseguró que el “Gobierno de Unidad” abordará la inseguridad y la “delincuencia en el país desarmando y desarticulando a los grupos paramilitares”.
Entretanto, los venezolanos están convocados hoy a un “paro cívico” de 24 horas impulsado por la oposición. El llamado fue rechazado por el ministro de Trabajo, Néstor Ovalles, que amenazó con sancionar a las empresas que se unan a la huelga.
