Tegucigalpa, Honduras.
Culpable. Así declaró ayer el Tribunal de Sentencia al exdirector del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), Mario Zelaya, en uno de los cinco casos que ya han pasado a juicio oral y público.
El fallo se dictó con el voto disidente de una de las juezas que acreditó que en este caso se violentaron los derechos constitucionales del imputado. Argumentó que el allanamiento ejecutado para este expediente fue ilegal, pues el juez ejecutor no fue juramentado por un juez de garantía, sino por la secretaria de este.
Además cuestionó que el allanamiento fue a las 3:10 pm del 6 de febrero de 2014 y el acta de juramentación del juez ejecutor señala que fue nombrado para esta acción a las 3:42 pm de ese mismo día.
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Durante el juicio a Mario Zelaya se le permitió hablar, y entre sus expresiones pidió a la institucionalidad respetar el tiempo que los abogados tienen con los imputados en las celdas del Primer Batallón. Dijo que el fallo tiene más que ver con el elemento mediático y con las situaciones que se han venido hablando del Seguro Social. |
Pese a ello, Zelaya fue declarado culpable y será presentado a los tribunales el 16 de febrero de 2017 para la audiencia de individualización de la pena.
El Poder Judicial informó que la pena concreta que Zelaya Rojas deberá cumplir por dicho delito es de 10 años 6 meses a 12 años de reclusión más el pago de una multa de 5,000 a 10,000 lempiras por cada arma incautada conforme lo establece el artículo 332 -A del Código Penal.
“El Ministerio Público estaba pidiendo 42 años de pena, pero el tribunal consideró que solo una era una arma de guerra, las otras eran comerciales. Pienso que serán unos 12 años como máximo”, dijo el abogado defensor Andrés Urtecho Jeanborde.
Mario Zelaya Rojas, exdirector del IHSS
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El fallo.
Ayer, Zelaya fue presentado a la sala 1 del Tribunal de Sentencia en donde se evacuó el juicio por almacenamiento ilegal de armas.
Entre las siete armas en cuestión estaba un rifle Mauser modelo 98, calibre 8 milímetros, un rifle Carabine modelo MZ, calibre 30 con mecanismo de acción automática y semiautomática mediante un selector de disparo y un fusil Remington, calibre 5.56, 45 milímetros, con mira telescópica. Según argumentos de la Fiscalía, estas armas de fuego son prohibidas por la ley porque son de uso de guerra, a excepción de la última que es considerada como de guerra por tener una mira telescópica.
Sin embargo, el Tribunal de Sentencia consideró que solo una de las armas, en este caso el rifle Mauser, es considerado como arma de uso prohibido.
En ese sentido, el Tribunal determinó declarar culpable a Zelaya por el delito de almacenamiento ilegal de armas de uso prohibido por una de las armas y culpable de almacenamiento ilegal de armas de uso comercial por seis armas.
 Mario Zelaya Rojas durante la audiencia alegó que se le violentó el debido proceso.
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Con esta resolución Zelaya recibió la primera condena de los ocho casos que la Fiscalía presentó en su contra, siete de ellos por el desfalco al IHSS. La sesión, inició a las 9:10 am con varios observadores entre ellos el jefe de la Unidad Nacional de Apoyo Fiscal (Unaf), Héctor Morales y el fiscal internacional de la Maccih, Manuel Garrido.
Uno de los actos más importantes en la sesión del juicio fue la presentación física de las siete armas de fuego que fueron encontradas dentro de una caja de cartón.
Cada una de las armas fue exhibida con su debido embalaje y con su número de serie, a excepción de una. Esto obligó al tribunal a solicitar a la Fiscalía la presencia de un perito de balística que indicara el número de serie del arma. La acción originó la suspensión del juicio de 20 minutos. La Fiscalía consideró que además Zelaya violentó la norma que indica que un ciudadano hondureño solo tiene derecho a registrar cinco armas de uso comercial.
La resolución que fue conocida hasta las 6:30 pm, se emitió pese a los esfuerzos de la defensa de que el tribunal diera por nulo el proceso alegando múltiples inconsistencias.
