16/03/2024
12:30 AM

Obama ofrece revisar casos de menores, pero no en EUA

El jefe de gobierno estadounidense se reunió con los presidentes de Honduras, Guatemala y El Salvador para abordar la crisis migratoria.

Washington, Estados Unidos.

Honduras llevaba la propuesta de que se permitiese reunificar a miles de niños que han sido detenidos en los últimos meses en la frontera de Texas y Arizona y que se les concediese el estatus de refugiados o asilados políticos.

De esta propuesta solo se le pudo arrancar a Obama la posibilidad de someter a revisión los casos de los infantes que comprueben que su vida corre peligro por la violencia que azota a sus países, pero sus expedientes serán revisados en sus naciones de origen, con lo cual se busca evitar que se expongan a la peligrosa travesía de llegar a este país.

Vea especial multimedia: Niños migrantes de Honduras

Expectativas truncadas

La reunión entre Obama y los presidentes de Honduras, Juan Orlando Hernández; de Guatemala, Otto Pérez Molina, y el gobernante salvadoreño Salvador Sánchez Cerén se celebró al filo de mediodía, hora de Washington, en medio de enormes expectativas de la comunidad hispana que reside en EUA.

De hecho, los principales medios internacionales que cubren la Casa Blanca dejaron por un momento los asuntos de la política local e internacional y se dedicaron a hablar de los niños migrantes.

Previamente, los gobernantes del triángulo norte de Centroamérica tuvieron un almuerzo con el vicepresidente Joseph Biden y más temprano se entrevistaron con el presidente del Banco Interamericano (BID), Luis Moreno, con quien dialogaron sobre la posibilidad de financiar la elaboración de una propuesta regional para aminorar la inmigración de niños. De los tres gobernantes, el jefe de gobierno hondureño fue el que más insistió en la necesidad de la reunificar a los niños con sus familias y de que la sociedad estadounidense vea el flujo infantil como un problema humano derivado de la violencia criminal que azota a estas tres naciones centroamericanas.

En un evento convocado el jueves anterior por el Centro Estratégico de Estudios Internacionales (CSIS), Hernández y Pérez Molina pidieron a los líderes estadounidenses un apoyo “mucho más agresivo” a sus naciones para atender las causas del flujo migratorio de niños a Estados Unidos.

Ambos mandatarios abogaron por la implementación de un plan integral similar a la Alianza para el Progreso o el Plan Colombia, dirigidos a afrontar las desigualdades sociales y económicas y frenar la estela de violencia y muerte que dejan las bandas del crimen organizado y transnacional.

Funcionarios de la administración de EUA adelantaron el jueves que estudiaban varias opciones para hacer frente al problema migratorio, entre ellas evaluar en los países de origen qué menores podrían ser candidatos a una emigración legal a EUA mediante la concesión, por ejemplo, del estatuto de refugiado si lo ameritan.

La reunión con Obama duró un poco más de una hora, mientras, afuera de la Casa Blanca, organizaciones que defienden los derechos de las minorías hispanas y de los migrantes pedían un tratamiento justo y humano para los niños detenidos en condiciones precarias en albergues de la Patrulla Fronteriza y unidades militares.

LA PRENSA fue el único periódico de Honduras que viajó con sus propios medios y estuvo presente desde el miércoles anterior dando cobertura amplia sobre el tema migratorio en la capital estadounidense. Además estuvo presente en la Casa Blanca cubriendo la histórica reunión presidencial.

Al cabo del encuentro, Obama ofreció una declaración oficial a los medios que cubrían la cumbre, flanqueado por los presidentes Juan Orlando Hernández a su izquierda, Salvador Sánchez Cerén y Otto Pérez Molina a su derecha.

Apoyo para Centro América: Obama

En sus declaraciones a los periodistas, el presidente Obama reiteró su compromiso de resolver el problema migratorio con sus colegas centroamericanos desde una visión de responsabilidad compartida, pero bajo las leyes norteamericanas.

Obama explicó que según la ley de Estados Unidos se puede aceptar a una cantidad específica de refugiados con criterios sumamente estrechos; estos criterios de selección y otorgamiento del estatus de refugiado no se basan en necesidades económicas, que vivan en barrios difíciles o estén en situación de pobreza.

“Normalmente tiene que haber una persecución del Estado o la persona debe estar en una situación incluso creíble de muerte y quizás, en ciertas circunstancias, algunos niños o niñas que están en estas condiciones pueden solicitar acogerse a esta condición; pero si ese es el caso, deben solicitarla en sus países de origen y que no se expongan a esta travesía tan larga a Estados Unidos”, apuntó.

Agregó que de otra manera no pueden darle cabida a una gran cantidad de menores migrantes que llegan a sus fronteras e insistió en que por eso es importante responder a las necesidades de corto y largo plazo y evitar que los traficantes de personas se lucren de las familias muy vulnerables.

“Que les demos seguridad a las familias y oportunidad de largo plazo en los países centroamericanos y que podamos crear un sistema para permitir que la migración a Estados Unidos sea ordenada y legal”.

El gobernante estadounidense dijo que trabajarán en consulta con los países centroamericanos con el propósito de identificar “medidas adicionales, tentativas y sensatas” para que las reunificaciones legales se puedan tramitar de manera justa y ordenada.

Tras agradecer a los mandatarios centroamericanos su presencia en la Casa Blanca, Obama dijo que la reunión se concentró en discutir la situación migratoria que afecta a las familias en riesgo y que conlleva peligro para los niños no acompañados de Centroamérica que intentan ingresar a Estados Unidos.

Responsabilidad compartida

Obama reconoció que este asunto requiere una responsabilidad compartida y que la reunión de los mandatarios con el vicepresidente Biden sirvió para tratar los pasos específicos para abordar este problema.

Añadió que habló con los Presidentes sobre los esfuerzos continuos de Estados Unidos, que incluyen incorporar más agentes de la Patrulla Fronteriza, dedicar más recursos en la frontera en instalaciones que atienden a los niños y asignar más presupuesto para tribunales migratorios cuyo objetivo es tramitar las reunificaciones de los niños de manera ágil, oportuna, en los que se respete el debido proceso.

“Hice hincapié ante los Presidentes en que el pueblo estadounidense y mi gobierno tienen gran compasión por estos niños y que estamos interesados en garantizar que reciban todos los cuidados que ameritan”.

Sobre el mismo tema, el mandatario norteamericano aclaró que Estados Unidos es una nación de migrantes, pero también es un Estado de leyes, por lo cual una inmigración desordenada que ponga en riesgo a las personas por su estatus migratorio envía señales equivocadas de que quienes sí siguieron el proceso legal no tienen respaldo de la ley.

Obama reconoció los esfuerzos de los Gobiernos de Honduras, Guatemala y El Salvador para desalentar el peligroso contrabando de niños y a los padres de familia que envían a su hijos en una travesía tan peligrosa y detener a las bandas de coyotes que trafican con personas aprovechándose de esta situación.

Se redujeron los ingresos

Los informes iniciales del Gobierno de Estados Unidos demuestran que los esfuerzos conjuntos dan resultados, como la reducción en más del 50% de los ingresos de niños no acompañados con respecto al mes anterior.

El titular de la Casa Blanca admitió que debe hacerse más al mediano y largo plazo para detener esta situación y resolver los problemas de pobreza y violencia en Centroamérica.

“Mi compromiso es trabajar con los Presidentes y colaborar para idear planes de acción agresivos con el fin de seguir trabajando en el fomento de la seguridad, en esfuerzos de desarrollo y mejor gobernabilidad en cada país”.

El mandatario reconoció la responsabilidad compartida de su país en este aspecto y en el tráfico de drogas porque la demanda se encuentra en Estados Unidos. Además dijo que se trabajará en reducir el tráfico de armas de norte a sur.

Sobre la reforma migratoria no ofreció una fecha específica, pero dijo que cuando se apruebe, Estados Unidos contará con capacidad de fortalecer los recursos que se destinan a la frontera, con el fin de tener una migración legal ordenada.

El Presidente estadounidense agregó que está pidiendo a los miembros del Congreso que aprueben recursos adicionales antes de las vacaciones de agosto para ofrecer seguridad en la frontera, crear más puestos migratorios y dotar de mayores recursos a los países centroamericanos con el propósito de atender esta problemática.

Finalmente agradeció a sus homólogos centroamericanos por su respuesta para atender la problemática de la forma más sensible y compasiva posible.