Sus creencias religiosas la han impulsado a ser una fiel defensora de la vida, lo cual la lleva a estar en desacuerdo con el aborto. Ella es Marta Lorena Alvarado de Casco, fundadora y miembro del Comité Provida, organización sin fines de lucro. Comenta que la única colaboración que tiene este comité es de jóvenes universitarios y profesionales que están a favor de la vida.
Bueno, soy hondureña, nací en La Ceiba.
Mi madre es nicaragüense y mi padre hondureño, Andrés Alvarado Puerto. Somos seis hermanos; yo soy la única mujer, la mayor.
Sí, fue político se desempeñó como canciller de la República en el gobierno de Villeda Morales y en el tiempo de Ramón Ernesto Cruz fue ministro de Agricultura.
Mi papá es hondureño, estudió en México tuvo una trayectoria de vida muy interesante y mi mamá es nicaragüense, doña Bertha Downing de Alvarado, se conocieron en el exilio porque ella era exiliada política en el tiempo de Somoza y él era exiliado político en el tiempo de Carías. Exiliados en Costa Rica, se casaron allá y se vinieron a Honduras.
Mi papá fue liberal, un gran liberal, de los liberales románticos de antes, que soñaban en grande y que tenían una visión de país no sectario. Yo aprendí a quererlos a todos. Nosotros crecimos liberales pero abiertos a todas las cosas buenas del país, yo estoy viviendo las bondades de país. Mi padre no nos enseñó a ser sectarios, creo que es una de las mejores herencias.
Estudié en Canadá y Guatemala, después, casada vivimos en Londres con mi esposo, estuvimos en Washington. Ya casada estudié periodismo en la José Cecilio del Valle, un profesor chileno me entusiasmó a estudiar esta carrera. Después comencé la lucha Provida, porque vi la necesidad que alguien o una organización mantuviera una voz permanente en defensa de estos bebés.
Incursioné en política por la misma defensa de la vida, me plantearon la oportunidad de estar ahí y poder ser una voz fuerte en el Congreso y creo que cumplí con mi cometido. Después, surgió la coyuntura de las crisis política, siendo diputada del gobierno de Manuel Zelaya y del cogreso de Micheletti. Fui vicecanciller en el gobierno de Micheletti el tiempo que duró previo a las elecciones.
Hubo conflicto con todos, el mundo nos marginó; en ese tiempo hubo un israelita que dijo que quizá solo Israel había tenido una historia parecida en una situación de aislamiento absoluto, y lo bueno que esto hacía que los países crecieran para adentro y crecimos para adentro, y lo que se hizo, era necesario hacerlo porque íbamos con rumbo igual al de Venezuela. Al día siguiente que se pretendía hacer la cuarta urna se iba a disolver el Congreso, ya se habían pedido los permisos de aterrizaje para todos los presidentes del ALBA que venían a la celebración de un nuevo país socialista.
En algún momento me tildaron de golpista y nos siguen tildando de golpista, pero viene directamente del léxico de los comunistas cuando alguien tiene una tendencia socialista comunista, siempre te tildan de golpista o de extremista o de ultraderecha eso está en el manual del adoctrinamiento de esa gente.
Absolutamente, no solo un día sino de los siete meses y considero que a Micheletti todavía no se le ha terminado de reconocer lo que hizo en su momento.
A mí me la devolvieron y no sólo me la devolvieron sino que he sido invitada más de alguna vez a Washington para estar presente en algún evento relacionado con mi labor.
Comenzamos en una sola voz, pues vamos a los pueblos, barrios, cárceles, escuelas, universidades a todos lados y ahora Provida es gracias a Dios una organización que tiene gente maravillosa. Somos un equipo, aquí hay médicos, sicólogos, abogados y jóvenes. Hay alianzas con universidades, tenemos muy buen equipo y nos llaman de San Pedro Sula, de La Ceiba, de los pueblos de Comayagua.
Cuatro veces se ha querido despenalizar el aborto, en todas hemos salido a la calle, hemos ido al Congreso a pedir que no se haga, hemos estado en los medios con intensidad, pero nunca como esta vez; ha habido dinero y una presión para que esto se llevara a cabo.
Provida no recibe un cinco de nadie, no existe ningún fondo de ningún organismo internacional, nadie nos da nada, somos autónomos. Solo tenemos una persona pagada y los demás somos voluntarios, somos felices en Provida porque no dependemos de nadie, nuestro compromiso es con la vida.
Excelente, tanto las declaraciones del presidente de la República y las del presidente del Congreso, como el 79% de diputados que votaron a favor y nueve en contra más algunas abstenciones han demostrado contundentemente que este tema, para mí, está cerrado, por lo menos por muchos años no va ser un tema a discusión.
Soy Católica y los quiero mucho, son las autoridades de mi iglesia.
Provida es ciudadana, no es de la iglesia, no es de ONG´S, nos juntamos, actuamos con total libertad y no somos parte de ningún movimiento ni de ninguna iglesia.
Esto se previene en la casa, los padres de familia tienen que ir haciendo conciencia, pues cada niña es un tesoro. Hay que enseñarles que valoren su cuerpo, que estudien, que hagan deporte y que tener relaciones sexuales es para después, cuando ellas tengan madurez.