18/04/2024
05:07 AM

Nuevo esquema de limpieza policial deja afuera a DIECP

Se otorga al director general de la Policía amplias facultades para despedir a agentes y oficiales corruptos. Reestructuran las direcciones y se crea Consejo Nacional de Directores.

Tegucigalpa, Honduras.

El proyecto de la nueva Ley Orgánica de la Policía Nacional propuesta por el Ejecutivo será dictaminado esta semana y en la siguiente será sometido a discusión y aprobación con el fin de acelerar el proceso de depuración institucional, pero bajo un nuevo esquema en el que no aparece la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial (DIECP).

La Comisión de Seguridad del Poder Legislativo retomará esta semana el dictamen para darle los últimos retoques al articulado del proyecto de ley y en ese contexto tiene previsto una reunión el próximo jueves con el secretario de Seguridad, Julián Pacheco, y los miembros de la cúpula policial.

Sectores sociales y académicos exigen la pronta aprobación de esta iniciativa con el fin de acelerar la inconclusa depuración policial en el momento que exoficiales y miembros activos de la institución han resultado implicados en actividades criminales con las maras.

Además, la nueva ley es parte del paquete de reformas legales que deberán aprobarse en el Congreso Nacional para facilitar el trabajo de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (Maccih).

El futuro de la DIECP es incierto al no dársele funciones específicas en la ley.
Las autoridades de la Secretaría de Seguridad aseguran que esta normativa otorga plenas y amplias facultades al director general de la Policía para separar a los agentes y oficiales implicados en actividades ilícitas y criminales; sin embargo, se cuestiona que esa potestad ya existe y los últimos directores no han tenido la voluntad política y la capacidad de profundizar en la depuración.

De hecho uno de los cuestionamientos que se le hacen a esta quinta reforma policial es que le da el tiro de gracia a la DIECP como ente autónomo y desconcentrado de la Secretaría de Seguridad y en su lugar se crea una División de Investigación y Certificación Policial adscrita al mando policial, de modo que la depuración vuelve al control de la cúpula policial.

El proyecto legal precisa que en adelante las denuncias contra un miembro de la carrera policial por la comisión de una falta o delito se tramitarán por la Inspectoría General.

La División de Investigación y Certificación Policial “será la dependencia encargada de practicar de forma general o selectiva a todos los miembros de la carrera policial, las pruebas toxicológicas, psicométricas, polígrafo y estudios socioeconómicos y patrimoniales.

DIECP desaparece

Al respecto, Tomás Zambrano, presidente de la Comisión de Seguridad del Congreso Nacional, precisó que la DIECP ya no aparece en este esquema, puesto que ahora se amplían las facultades del director general para adecentar la institución de las manzanas podridas. Para el caso se le asignan al director atribuciones en materia disciplinaria y administrativa, dejándolo como responsable de emitir los acuerdos de cancelación por despido a los oficiales, suboficiales, clases y agentes, conforme a la Ley de Personal de la Carrera Policial.

Consultado si la DIECP continúa al frente de la investigación y evaluación de los policías, el legislador precisó que ese es un tema que no se ha definido y que está pendiente; “pero creo que (la DIECP) ya no va a continuar”.

Zambrano detalló que la nueva ley se fundamenta en el fortalecimiento de las instituciones encargadas del control formal del delito desde diversos puntos de intervención, así como la dotación de efectivas herramientas jurídicas que garanticen el profesionalismo, la transparencia, la gestión por resultados, rendición de cuentas, el respeto de los derechos humanos y la protección de la ciudadanía.

Foto: La Prensa

El Congreso Nacional retomará esta semana el dictamen de la Ley Orgánica de la Policía.
Entre otras cosas, la nueva ley redefine las direcciones policiales estableciendo un total de 10, se crean las agregadurías policiales para oficiales generales en misiones diplomáticas y se crea el Consejo Nacional de Directores (CND) integrado por el director y subdirector general y los titulares de cada una de las direcciones nacionales.

Zambrano detalló que en el dictamen se proponen varios cambios, entre ellos, que la Secretaría de Seguridad quede compuesta por seis niveles: político, asesor, coordinador, auxiliar, de apoyo y operativo.

Se mantienen como órganos consultivos el Consejo Nacional de Seguridad Interior (Conasin), el Consejo Asesor Estratégico y el Consejo de Seguridad Vial. Además, se propone que la Policía Nacional quede con línea y unidad de mando definida en vista que la propuesta original muestra una estructura confusa.

También se elimina el Directorio Policial Superior, se derogan varias unidades asesoras y se crea el Observatorio Policial de la Violencia.

Fortalecimiento

Sobre este tema, Oscar Vásquez, titular de la DIECP, manifestó que mantienen su postura de que esta institución no desaparezca y más bien sea fortalecida en vista que la historia indica que la Policía no ha tenido la capacidad de autodepurarse.

De hecho adelantó que han elaborado una propuesta de ley que se elevará a consideración del Presidente Juan Orlando Hernández para fortalecer la DIECP en la que se propone que dependa directamente del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa y que se le concedan atribuciones sancionatorias por encima de otras instituciones del Estado.

Además se ha trabajado en una reestructuración para que la institución pueda trascender y ser más efectiva en el tema de depuración.

Vásquez lamentó que no se haya tomado en cuenta las propuestas de cambios que el equipo legal de la DIECP le propuso al ministro de Seguridad para incorporarlas en la nueva Ley Orgánica.

Con respecto a las atribuciones que se le otorgan al director general para depurar el estamento policial, Vázquez dijo que eso no es nada novedoso, en vista que en el pasado se le han otorgado las mismas potestades sin los resultados esperados.

Sobre el tema, la rectora universitaria Julieta Castellanos volvió a cuestionar los magros resultados en el proceso de depuración policial y dijo que la Policía en vez de ser un factor de seguridad se ha convertido en una tragedia.

Criticó que la institución no sea capaz de investigar a sus mismos policías y los ha dejado que se enriquezcan. “Ha dejado que creciera ese monstruo de corrupción y de criminales, y digo así porque he sido víctima de la Policía”, arguyó.