San Pedro Sula, Honduras.
Unos cincuenta millones de lempiras ha dejado de percibir la alcaldía sampedrana por la destrucción de las casetas de peaje.
Junto con San Pedro Sula se ven afectados los municipios de San Manuel y La Lima, que recibían un porcentaje por los ingresos en las casetas del este.
Los peajes fueron destruidos en diciembre y, según registros municipales, cada día recolectaban unos 800,000 lempiras, cantidad que incrementaba en temporadas como Semana Santa.
La Corporación Municipal aún no discute el asunto, pese a que está estipulado en el Plan de Arbitrios Municipal 2018.
El alcalde Armando Calidonio explicó que la ciudad va rumbo a convertirse a una ciudad inteligente, por ello es la oportunidad de implementar sistemas diferentes que no sean casetas de peaje.
“La idea es tener un sistema de flujo continuo, y es algo que se está verificando. En su momento daremos los detalles, pues es necesario documentar todo lo que pasó”, aseguró.
Destacó que con la Corporación Municipal se elaborará una propuesta para implementar el flujo continuo con sensores y tecnología sin parar el tráfico.
“Hay un tema de implementar chip o lectores de placa, pero se está planteando, estructurando, para ponerlo en práctica”, manifestó.
Con la destrucción de las casetas de peaje se perdieron 70 millones de obras físicas y se dejan de ingresar 800,000 lempiras diarios a las cuentas municipales.
El regidor José Antonio Rivera explicó que “estamos a la espera de un informe que presente el alcalde para saber cuánto se ha perdido hasta la fecha”, aseguró.
Como Corporación Municipal podemos decidir sobre el peaje del norte y del sur; no obstante, el del este es compartido y fue aprobado mediante decreto del Congreso Nacional, aseguró.
El analista Nelson García Lobo explicó que se tiene que lograr una participación más activa del sector privado y una mayor interacción con los diferentes sectores sociales.
Convencer nuevamente al ciudadano de que pague el peaje en las salidas de la ciudad sin que se considere violentado es otro de los grandes retos, destacó.
Llamó a revivir una comisión ciudadana de transparencia y una participación mas beligerante del comisionado municipal a fin de garantizar que los recursos son bien invertidos.
Unos cincuenta millones de lempiras ha dejado de percibir la alcaldía sampedrana por la destrucción de las casetas de peaje.
Junto con San Pedro Sula se ven afectados los municipios de San Manuel y La Lima, que recibían un porcentaje por los ingresos en las casetas del este.
Los peajes fueron destruidos en diciembre y, según registros municipales, cada día recolectaban unos 800,000 lempiras, cantidad que incrementaba en temporadas como Semana Santa.
La Corporación Municipal aún no discute el asunto, pese a que está estipulado en el Plan de Arbitrios Municipal 2018.
El alcalde Armando Calidonio explicó que la ciudad va rumbo a convertirse a una ciudad inteligente, por ello es la oportunidad de implementar sistemas diferentes que no sean casetas de peaje.
“La idea es tener un sistema de flujo continuo, y es algo que se está verificando. En su momento daremos los detalles, pues es necesario documentar todo lo que pasó”, aseguró.
Destacó que con la Corporación Municipal se elaborará una propuesta para implementar el flujo continuo con sensores y tecnología sin parar el tráfico.
“Hay un tema de implementar chip o lectores de placa, pero se está planteando, estructurando, para ponerlo en práctica”, manifestó.
Con la destrucción de las casetas de peaje se perdieron 70 millones de obras físicas y se dejan de ingresar 800,000 lempiras diarios a las cuentas municipales.
El regidor José Antonio Rivera explicó que “estamos a la espera de un informe que presente el alcalde para saber cuánto se ha perdido hasta la fecha”, aseguró.
Como Corporación Municipal podemos decidir sobre el peaje del norte y del sur; no obstante, el del este es compartido y fue aprobado mediante decreto del Congreso Nacional, aseguró.
El analista Nelson García Lobo explicó que se tiene que lograr una participación más activa del sector privado y una mayor interacción con los diferentes sectores sociales.
Convencer nuevamente al ciudadano de que pague el peaje en las salidas de la ciudad sin que se considere violentado es otro de los grandes retos, destacó.
Llamó a revivir una comisión ciudadana de transparencia y una participación mas beligerante del comisionado municipal a fin de garantizar que los recursos son bien invertidos.
