San Pedro Sula, Honduras.
El portero panameño José Calderón fue protagonista de una infantil expulsión en el clásico sampedrano que el Marathón perdió por goleada (4-0) frente al Real España en el estadio Morazán.
Pasada la media hora del partido, el árbitro Said Martínez pitó un polémico penal a favor de la Máquina, una decisión que molestó muchos a los jugadores del Monstruo Verde y le reclamaron fuerte al sílbante.
Calderón se enfadó mucho y le tiró el balón a Said en la espalda. El árbitro no se dio cuenta de quien había sido, pero uno de sus asistentes le avisaron y Martínez le mostró la tarjeta roja al internacional con Panamá.
José Calderón y sus compañeros le reclamaron fuerte al árbitro Said Martínez. Foto Neptalí Romero
|