La Ceiba, Honduras.
Un inusual hecho que casi le cuesta la vida a una ceibeña se suscitó el domingo a eso de las 10:30 pm cuando disfrutaba de los juegos mecánicos con su familia por la celebración de la Feria Isidra.
Katerine Espinal (16) se subió a la rueda de Chicago, pero a las dos vueltas le invadió el pánico y decidió lanzarse desde el juego ante el asombro de centenares de personas que se encontraban disfrutando de las atracciones que ofrece la feria.
La joven resultó con fracturas en la cadera. Una ambulancia del Cuerpo de Bomberos trasladó a la joven al Hospital Atlántida. Ayer en horas de la mañana se encontraba en el quirófano para ser intervenida.
Antes de ingresar, la jovencita dio escuetas declaraciones a los medios sobre lo sucedido.
“Tenía demasiado miedo y me tiré de un solo deslizándome por abajo. No pensé en ese momento, fue una decisión mía de tirarme, aunque no recuerdo nada. Fue mi culpa y no la de los juegos”, dijo en su lecho de enferma.
Los parientes de Katerine no quisieron dar su opinión sobre la determinación de la joven de lanzarse de la rueda.
En un inicio se creía que el incidente era producto de una falla mecánica del aparato y mucha gente criticó que los juegos mecánicos eran inseguros y que no les daban mantenimiento; sin embargo, tras obtener la versión de la muchacha, esta apreciación cambió. El equipo de La Prensa se trasladó al campo de juegos para constar su funcionamiento, pero el propietario no se encontraba. Algunos empleados mostraron que las máquinas están en permanente mantenimiento y antes de abrir al público se revisan minuciosamente para evitar tragedias.
Un inusual hecho que casi le cuesta la vida a una ceibeña se suscitó el domingo a eso de las 10:30 pm cuando disfrutaba de los juegos mecánicos con su familia por la celebración de la Feria Isidra.
Katerine Espinal (16) se subió a la rueda de Chicago, pero a las dos vueltas le invadió el pánico y decidió lanzarse desde el juego ante el asombro de centenares de personas que se encontraban disfrutando de las atracciones que ofrece la feria.
La joven resultó con fracturas en la cadera. Una ambulancia del Cuerpo de Bomberos trasladó a la joven al Hospital Atlántida. Ayer en horas de la mañana se encontraba en el quirófano para ser intervenida.
Antes de ingresar, la jovencita dio escuetas declaraciones a los medios sobre lo sucedido.
“Tenía demasiado miedo y me tiré de un solo deslizándome por abajo. No pensé en ese momento, fue una decisión mía de tirarme, aunque no recuerdo nada. Fue mi culpa y no la de los juegos”, dijo en su lecho de enferma.
Los parientes de Katerine no quisieron dar su opinión sobre la determinación de la joven de lanzarse de la rueda.
En un inicio se creía que el incidente era producto de una falla mecánica del aparato y mucha gente criticó que los juegos mecánicos eran inseguros y que no les daban mantenimiento; sin embargo, tras obtener la versión de la muchacha, esta apreciación cambió. El equipo de La Prensa se trasladó al campo de juegos para constar su funcionamiento, pero el propietario no se encontraba. Algunos empleados mostraron que las máquinas están en permanente mantenimiento y antes de abrir al público se revisan minuciosamente para evitar tragedias.
