A pesar de ser enviado al centro penal, el anciano Francisco Maldonado Baca, acusado de asesinar a su empleada doméstica, aseguró que no se arrepiente de cometer el hecho.
En la audiencia de declaración de imputado, un juez decretó la medida cautelar de detención judicial y remitió al señor al presidio progreseño.
Maldonado fue capturado el pasado sábado, en su vivienda en el barrio Los Jazmines, por matar a su empleada Maribel Flores (de 55 años).
El hecho violento ocurrió cuando supuestamente la víctima intervino en una discusión entre sus patrones, por lo que el hombre sacó su arma y ultimó de dos balazosa su empleada.
Respecto al hecho violento, el anciano dijo que todo comenzó porque él pidió que le sirvieran la comida afuera de la casa, ya que “no quería estar encerrado”, fue entonces cuando Flores intervino.
“A esa señora solo pegarme le faltó, tanto que me ofendió. No encontraba qué decirme. Entonces no tuve más que agarrar el revólver y dispararle, ya no aguantaba yo”, declaró.
Cuando se le consultó al hombre si se arrepentía de lo sucedido, expresó: “No me arrepiento. En realidad fue una cosa que me rebalsó demasiado. Y ahora si me toca morir aquí, pues aquí me muero”.
Al momento de la captura le decomisaron el revólver con el que le quitó la vida a la señora que trabajó para él durante varios años.
Parientes de la occisa lamentaron el hecho y piden que se haga justicia.
La audiencia inicial será el próximo viernes a las 9:00 am. Ahí el juez determinará si el señor sigue preso o lo remiten a un centro especial para personas de la tercera edad.
Maldonado es acusado de homicidio y parricidio en su grado de ejecución de tentativa en perjuicio de su esposa.
