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Tres hijos deja subdirectora ultimada en Ticamaya

  • 19 abril 2016 /

San Pedro Sula, Honduras.

Ayer cuando una maestra iba en un taxi rumbo al centro educativo adonde laboraba, un sicario la mató a balazos en la carretera a Ticamaya.

El crimen de la educadora identificada por sus familiares como Wendy Patricia Mejía Rosales (47) se produjo minutos antes de las 7:00 am.

Las autoridades policiales que estaban en la escena del crimen informaron que, según lo relatado testigos, a esa hora el taxi en el que viajaba la profesora circulaba por dicha vía en las inmediaciones de la colonia Sitradima.

Cuado el conductor del taxi con número de registro 2028 bajó la velocidad para pasar un túmulo, situado a pocos metros de la entrada a la colonia Sitradima, un turismo rojo le rebasó y se le atravesó adelante para que parara la marcha.

Foto: La Prensa

Wendy Mejía (47) tenía 12 años de laborar en el centro básico José Trinidad Cabañas.
El taxi al parar la marcha se bajó del turismo rojo un individuo que disparó con una pistola varias veces contra la maestra a través del vidrio delantero. La mentora viajaba al lado del conductor del taxi. Los testigos le relataron a la Policía que en el turismo se transportaban el individuo que se bajó a disparar y otros dos tipos.

Los ocupantes del carro rojo al ultimar a la maestra huyeron rumbo a Ticamaya.

Luego del ataque a la profesora y al ver que el carro de los delincuentes se había marchado, el taxista puso en marcha su automóvil y se fue a estacionar frente al desvío a la colonia Sitradima ya con la educadora muerta.

Según las averiguaciones de la Policía, Mejía Rosales se subió al ruletero en el bulevar del este en el desvío a Ticamaya y se dirigía al centro básico de estudios José Trinidad Cabañas, situado en la aldea de San José del Boquerón. Compañeros de trabajo de Wendy Patricia Mejía manifestaron que era una buena maestra, jovial y muy querida por todos en la escuela. Indicaron que impartía clases a los alumnos de sexto grado y era la subdirectora del centro educativo. Mejía Rosales también impartía clases en horas de la tarde en otro centro básico de la colonia Pradera, de San Pedro Sula.

Los familiares de la infortunada maestra manifestaron que era una mujer trabajadora que no tenía enemistades.

Indicaron que Wendy Patricia deja tres hijos y era divorciada. Dijeron que ignoran por qué le quitaron la vida.

Tenía 27 años de carrera en la docencia y laboró doce años en el centro básico José Trinidad Cabañas.

Familiares de la victimada maestra Wendy Patricia Mejía Rosales que llegaron a la escena del crimen lloran su muerte.