La Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida (FEDCV) coordinó una serie de labores de inspección, levantamiento de evidencias y pruebas de campo al interior de la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS) en Francisco Morazán, como seguimiento a la investigación de la muerte violenta de seis privadas de libertad.
La noche del pasado 23 de mayo, un grupo de mujeres fueron asesinadas en una reyerta en la cárcel ubicada en Támara, en donde además hubo un incendio en el módulo 89.
Las víctimas mortales respondían a los nombres de Wendy Salinas , Lizeth Moreno , Margarita Gómez , Patricia Velásquez, Gilda Ruiz y Karla Vallecillo.
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El trabajo investigativo de este día, lo efectúaron Fiscales Contra Estructuras Criminales Organizadas y de Muerte Violenta de Mujeres de la FEDCV, en conjunto con la Unidad de Homicidios de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
Durante las inspecciones, las autoridades recolectaron prendas, armas blancas y objetos utilizados para el crimen. Lo que se suma a los indicios del Ministerio Público, que permitirán contar con toda la evidencia científica necesaria para imputar los delitos a los responsables.
 En menos de un año se han suscitado más de tres amotinamientos en cárceles de Honduras dejando decenas de muertos.
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