Todo se ha dicho y solo falta esperar, así como espera ansiosa la familia real inglesa y el clan Middleton para el desenlace del parto de la duquesa Catalina de Cambridge.
Como antesala al gran advenimiento del año en la realeza europea, la reina Isabel II y toda su descendencia Windsor atendió invitación al concierto celebrado en el palacio de Buckingham para celebrar el 60 aniversario de la coronación de la monarca.
El show reunió a unas 200 compañías que han contado con la casa real como cliente en los últimos cinco años.
Los futuros abuelos, Michael y Carole, así como los hermanos de Catherine, James y Pippa fueron invitados personalmente por la reina para unirse a ella en el palco real, en el que era el primer día del Festival de la coronación que se celebrará hasta el próximo día 14 de julio en los jardines del palacio.
Los grandes ausentes del evento fueron los futuros papás, el príncipe William y su esposa Catalina.
La duquesa de Cornualles no faltó a la cita y confesaba durante su asistencia ayer a los jardines de palacio: “Estamos muy emocionados. Lo esperamos inmensamente y estamos pendientes de que suene el teléfono”.
El bebé podría nacer en cualquier momento, por lo que el futuro papá se encontraría ya junto a su mujer para esperar la llegada de la cigüeña. El helicóptero del príncipe William salió el viernes misteriosamente de la comunidad de Angesley, en donde hace trabajo comunitario.
