Hondutel tiene 2,000 empleados para atender 255,000 líneas telefónicas
Un operador privado atiende con menos trabajadores (1,200) casi 24 veces más la capacidad de Hondutel (6 millones de líneas). Pérdidas financieras de empresa estatal acumulan más de L1,300 millones.
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La empresa requiere grandes inversiones de capital para competir. Buena parte de sus equipos (arriba) ya han quedado obsoletos. El plan de recuperación de la gerencia incluye la cesación de cientos de empleados supernumerarios. Fotos: H. Edu/LP
15 min. de lectura
San Pedro Sula
Hubo una época en la que hablar de telecomunicaciones en Honduras era hablar de Hondutel. Si uno necesitaba una línea telefónica, debía esperar meses, si no años, para obtenerla.
Pero de aquel monopolio de la estatal queda muy poco en la actualidad, habiéndose convertido la empresa en una sombra de su pasado.
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Las últimas décadas no han sido fáciles en uno de los rubros comerciales que más crecen y donde mayor competencia se produce y, en ese competido mercado, Hondutel parece entrar con desventaja frente a sus rivales del sector privado.
- > Mientras un operador privado atiende 6 millones de líneas con unos 1,200 empleados, Hondutel atiende unas 255,000 con 2,000 empleados.
Mientras que sus competencias del rubro crecen sin parar, la empresa estatal se mantiene rezagada en lo tecnológico y aunque todavía mantiene una relativa fuerza en el mercado de telefonía fija (cuota de mercado: 61%), carece en este momento de los recursos para ser un verdadero protagonista en los segmentos de telefonía móvil e internet.
Esta situación se refleja en sus estados financieros, que, de acuerdo con los datos que publica en su portal de transparencia, viene acumulando pérdidas en cinco de los últimos seis años, las cuales ya superan los 1,300 millones de lempiras.
De acuerdo con esos mismos documentos, la última vez que la estatal de telecomunicaciones reportó alguna clase se utilidad fue en 2017, cuando registró un margen de 25.2 millones de lempiras.
Desde entonces, la situación ha venido empeorando, alcanzando su punto más bajo en 2021, cuando en plena pandemia de covid-19, las pérdidas acumulados fueron de 312.8 millones de lempiras.
Planes de recuperación
El actual gerente de Hondutel, Carlos Orbin Montoya, reconoce la complicada situación financiera en que se encuentra la empresa, cuyas pérdidas entre 2018 y 2022 promedian los 21.9 millones mensuales.
Montoya explica que la pandemia trajo consigo un efecto negativo en sus operaciones, pues dio como resultado el retiro de numerosos clientes que dejaron los servicios de telefonía fija para pasarse a los servicios móviles que ofrece el sector privado.
De acuerdo con las últimas cifras publicadas por la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), el número de líneas fijas entre diciembre de 2021 y septiembre de 2022 se redujo en 7%, pasando de 274 mil a 255 mil en un período de 9 meses.
- > 4.34 Es la cantidad de líneas fijas activas por cada 100 habitantes, estimada en septiembre de 2022. En diciembre de 2021, era de 4.93 por cada 100 habitantes.
- > 415,000 líneas telefónicas fijas, estimó Conatel que había en Honduras hasta septiembre pasado, entre Hondutel y el resto de operadores privados.
“Hemos mejorado mucho el internet y estamos tratando de equilibrarlo en el transcurso de estos próximos meses a modo de que la empresa no sea deficitaria”, dice Montoya, quien ve un importante elemento de recuperación en las nuevas contrataciones con las instituciones del Estado que Hondutel gestiona a fin de proveer servicios de alta tecnología para una serie de proyectos de lo que se llama Estado Digital, así como en la expansión de la red de fibra óptica, para alimentar el servicio de internet escolar.
Por otro lado, añade Montoya, el presupuesto de la estatal tiene asignada una partida de 600 millones de lempiras para la modernización de sus equipos, muchos de los cuales, reconoce el gerente, se han quedado “obsoletos”.
El funcionario delineó una estrategia para recuperar clientes a través de la ampliación de los servicios de telefonía fija, con tarifas más baratas, minutos gratis a Estados Unidos, tarifas baratas a Europa y otros servicios.
Completa esta estrategia la incorporación de un socio estratégico para la mejora de la oferta de los servicios de internet, servicios 4G y 5G e incluso servicios para televisión.
“Tenemos ofertas de Estados Unidos, Francia y algunos de Corea del Sur”, asegura, al hablar sobre las negociaciones con socios potenciales.
El gerente de la estatal proyecta que, si todo sale según lo planeado, sería posible revertir las situación de la telefonía fija en un plazo de seis meses, mientras que en lo referente a la tecnología móvil, podría tomar hasta un año, si no más.
Montoya proyecta que, una vez efectuadas las inversiones necesarias, la empresa podría volver a la senda de la rentabilidad, con ingresos que promedien los 120 millones de lempiras mensuales.
El plan no deja de estar cuesta arriba. Montoya ejemplificó que Hondutel carga con una planilla de 2,000 empleados para atender unos 150,000 líneas telefónicas (LA PRENSA Premium cotejó que en Conatel que la cifra oficial es de 255,000), mientras que un operador privado, con 1,200 trabajadores, se encarga de seis millones de líneas.
Escepticismo
Pero no todos comparten el optimismo del gerente de Hondutel. A criterio de algunos analistas, la situación de Hondutel tiene pocas posibilidades de recuperarse tal como esperan quienes la administran.
“En lo personal, veo que esa empresa no tiene salida para lograr el equilibrio porque es muy diferente a la Enee por dos aspectos. A la empresa de energía eléctrica se le está inyectando capital, pero es la única empresa prácticamente que presta ese servicio en el país”, observa la economista Liliana Castillo, expresidente del Colegio Hondureño de Economistas (CHE).
Castillo postula que, para recuperar Hondutel, la empresa tendría que ser un competidor fuerte en el segmento de telefonía móvil, y para eso, se requiere una sustancial inversión de capital.
“No creo que el gobierno esté dispuesto a inyectarle esa inversión grande que se requiere porque ya lo está haciendo en grandes proporciones con esta otra empresa que es la Enee”, dice la economista.
El analista Rolando Milla añade a esto que “Hondutel tiene un gran problema: que la empresa tecnológicamente no se capacitó y no está preparada para dar un servicio de esa altura”.
El analista recordó que la empresa que otrora fuese la proverbial “gallina de los huevos de oro”, quedó descapitalizada cuando el gobierno, en su afán de disponer recursos, sacó capital de la empresa de comunicaciones, lo que no solo no reintegró, sino que lo usó para otros menesteres ajenos a Hondutel, agravando su situación financiera y provocando el rezago tecnológico que ahora enfrenta.
“Se olvidaron de ir inyectándoles esa esencia básica de la tecnología moderna que hoy en día utilizan las comunicaciones”, lamentó.Y mientras que sus administradores anuncian planes de altos vuelos, el futuro de la estatal se mantiene incierto a la espera de resultados.
