Narcos de Olancho y Colón pierden fuerza

TEGUCIGALPA.

“La droga sigue pasando y eso significa que las estructuras de los extraditables están operando”.El que habla es un agente antidrogas que va más allá e informa quiénes son los operadores de los narcos que están encarcelados en Estados Unidos: “De algunos son sus familiares y de otros sus amistades”.

“Las personas que quedaron al frente de esos carteles conocen las rutas, los contactos y las estrategias en el negocio de la cocaína”, añade el experto en la lucha contra el narcotráfico.

“Los carteles no se han desarticulado, están con nuevos cabecillas. Y algunos mantienen sus jefes, quienes pese a estar presos, siguen dando instrucciones y coordinando las operaciones del tráfico de drogas”.

Corrupción facilita tráfico de drogas, al atraer a diversas autoridades y funcionarios para trasegar estupefacientes.

Otros agentes de inteligencia antidrogas se suman a la charla y añaden que los carteles actuales han bajado su perfil y ya no ostentan el poderío al que estaban acostumbrados en antaño.

“Ya no hay derroche, están más en el anonimato”, señalaron.

Las estructuras de los extraditados más poderosos están activas, establecen alianzas y siguen enviando droga hacia México y Estados Unidos, según autoridades contra el narcotráfico.

Crecen narcos en La Mosquitia. En el mapeo que hacen tanto autoridades como analistas, han detectado que en la zona de La Mosquitia es donde más están creciendo los grupos de narcotraficantes y esto está originando disputas.

Vigilancia en la zona sur Un nuevo punto en la ruta del narcotráfico se enfoca en la región sur de Honduras, en el Pacífico, donde según Inteligencia, están llegando los cargamentos de droga. El interés de los narcotraficantes por adquirir tierras en la zona ha sido notorio desde 2012, donde instalaron pistas y bodegas para ocultar la droga. Pese a esto, no se han hecho operativos grandes para decomisar droga en ese sector.

“Hay un conflicto con los traficantes de La Mosquitia, son grupos que están creciendo aceleradamente y desplazando a los narcos de Colón y Olancho.

En esas comunidades a lo largo del Atlántico, especialmente en Sico, Colón, se continúa dando el movimiento habitual de venta de droga”, expresó el analista Raúl Pineda Alvarado.

Las fuerzas policiales y militares se refuerzan con escudos aéreos, marítimos y terrestres, pero los narcos cambian de ruta frecuentemente y siempre buscan cómo contaminar a las autoridades.

Base en Honduras

Antes, los envíos de droga a Honduras partían desde Apure en Venezuela y desde Colombia, tanto por vía aérea como marítima.Sin embargo, ahora los carteles ven a Honduras no solo como país de tránsito, sino como base para que las embarcaciones zarpen en busca de la droga.

“Con las lanchas rápidas, antes la droga salía de Colombia para Honduras, pero ahora tienen su base en Honduras. Es desde aquí que se hacen los despachos, tienen una travesía de 14 horas, lo que les da para ir en busca de los cargamentos de droga y regresar.

Datos - 9.5 millones de lempiras decomisó la DLCN en diversos operativos realizados en 2019 contra narcotraficantes. - 231 detenidos por narcotráfico reportó la Fiscalía en las operaciones realizadas durante 2019.

La mayor cantidad de cocaína que está llegando al país viene por la vía marítima”, explicó Pineda Alvarado.

Para la vía aérea están utilizando avionetas Cessna 206, que son baratas y tienen una autonomía de nueve horas de vuelo, eso hace que inevitablemente tengan que reabastecerse de combustible en Honduras para llegar a Guatemala o México.

“Los traficantes hondureños no distribuyen droga en el país, no tienen autoridad para disponer ni de un kilo de droga. La droga que circula en el país es la que se pierde en accidentes de aeronaves, cuando la tiran al mar durante las persecuciones o la que es decomisada.

Pero decir que Honduras es un país donde un cartel de Colombia va a mandar droga para consumo están equivocados”, apuntó el analista Pineda.

Foto: La Prensa

Los relevos

El liderazgo de algunas agrupaciones criminales lo asumieron familiares de los que están presos en Estados Unidos.

Otros carteles se sumergieron en una lucha de poder que provocó en algunos puntos, violencia, todo con el afán de tener el control de la estructura.

“El reacomodo generó conflictos, lucha de poder a lo interno, porque en juego no solo estaba ser la cabeza de la agrupación, sino también tener el control de plazas, la distribución total de drogas. Se han dado rupturas para consolidar las organizaciones criminales y eso se refleja en la oleada de violencia, producto de esa recomposición”, explicaron los agentes antidrogas.

Esto golpea comunidades, pero también genera en los jóvenes, según las autoridades, el deseo de incursionar como bandera, mula o transportista de los carteles.

“Los jóvenes -en los municipios donde impera la ley del narco- no quieren ser médicos o estudiar para otras profesiones, ahora los jóvenes quieren ser traficantes, pues hay una ausencia de valores tanto en la familia como en la sociedad. El reto para construir una cultura de paz es grande”, indicó Raúl Pineda Alvarado.

Las agencias antidrogas en el país refieren que entre los años 2015 y 2016, hubo una reducción en la narcoactividad, pero en 2017 surgieron nuevas estrategias para transporte de estupefacientes y eso demuestra que las agrupaciones no se debilitaron, que lo que ocurrió fue un proceso de transición, mientras las piezas se acomodaban para reordenar la estructura y encontraban los nuevos liderazgos.

Pese a esto, aseguran, trabajan para cerrar espacios y no permitir que el territorio nacional sirva de plataforma para el trasiego de drogas.

6 claves del combate al narco

Fiscalía dirigió 39 operaciones contra el narcotráfico en Honduras TEGUCIGALPA. En los últi­mos cinco años, la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organiza­do y la Dirección de Lu­cha Contra el Narcotráfico (DLCN) ejecutaron 39 operaciones dirigidas a las organizaciones de narcotraficantes, que desmantelaron narcolaboratorios, aseguraron bienes y capturaron a varios de sus integrantes. En total fueron asegurados 884 bienes inmuebles, 725 vehículos, 306 productos finan­cieros y 136 sociedades mercanti­les. En ese proceso se desarticularon los relevos y mandos secundarios de los carte­les. Según los datos de la Fiscalía, fueron 18 operaciones contra familiares, socios, testaferros de los extraditados, en las que se logró asegu­rarles 418 bienes inmuebles, 687 ve­hículos, 100 productos financieros, cuentas bancarias y 42 sociedades mercantiles. El trabajo de investigación y las denuncias han sido claves en el proceso para desarticular las estructuras. Hay operaciones en curso que se dirigen a puntos claves en el país y que darán golpes a los narcos que se afincan en zonas estratégicas de la ruta por donde pasa la droga en el país. Entre las principales operaciones de la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico están la operación Neptuno contra la organización de los Rivera Maradiaga, la operación Tritón contra la organización del clan Zelaya- García, la operación Redada contra socios de Los Valle Valle y la operación Tauro I y II contra la organización vinculada con el aterrizaje de narcoavionetas. Foto: La Prensa