26/04/2024
08:58 AM

Página en blanco y el tutti frutti

San Pedro Sula, Honduras

A veces, un escritor se sienta frente a la pantalla en blanco de su computadora en busca de un tema y sucede que no puede encontrarlo, a veces pasan horas y en algunas ocasiones el bloqueo dura días. Pero en otras, como hoy, hay tantos que la abundancia produce un efecto parecido y no se encuentra cuál de todos tocar.

Hoy voy a tratar de escribir sobre lo que se me viene a la cabeza como una avalancha, lo de actualidad y algunas ideas disparatadas.

Empezaré por una cosa llamada Neymar, un jugador de fútbol capaz de competir por el premio óscar en la categoría de “caídas dramáticas”. Resulta que el hombre aprendió a lanzarse al suelo y fingir un gran dolor para tratar de provocar un penal en el equipo contrario, solo que se le olvidó que ahora los árbitros revisan todo en televisión.
No logró el penal. Creo que la Fifa (si de verdad quiere limpiar de tanta suciedad y corrupción el fútbol) debería establecer un castigo para esas actuaciones que ensucian el deporte.

Otra cosa que debería hacer la Fifa, así como los jugadores de la selección de cada país, también tienen que ser ciudadanos del mismo los directores técnicos; asimismo, médicos y personal auxiliar. Está bien que los “Zinedine Zidane” puedan dirigir equipos de otros países, pero las selecciones deberían serlo únicamente por nacionales.
Tengo que comentar sobre el paro del transporte, pues siento que aunque la gente tiene que caminar y que todos estamos conscientes del trastorno y las pérdidas que ocasiona, la mayoría está de acuerdo con los transportistas, a pesar de sufrir toda clase de incomodidades.

¿Será que sentimos simpatía por todo lo que se opone al Gobierno?, ¿será por los 23 lempiras?, ¿será que la rebelión de Nicaragua es contagiosa?, ¿se tratará de una “primavera centroamericana”?
Pero para problemas grandes los que tienen los Estados Unidos con la particular manera de ser del presidente Trump.

Resulta que después de su reunión con el Presidente ruso declaró que no creía que ese Gobierno hubiera tratado de influenciar las elecciones que llevaron al mismo Trump a la Presidencia de los USA, aunque así se lo hubieran dicho sus propias agencias de espionaje e inteligencia.

Los norteamericanos ya deberían estar acostumbrados a sus desaciertos, pero eso fue demasiado, hasta se le llegó a calificar de traidor. Inmediatamente, el agobiado Departamento de Control de Daños de la Casa Blanca trató de explicar lo inexplicable y, al no lograrlo, como siempre intentó confundir las cosas.

Pobre Trump, pero la verdad es que Google tiene razón (busque la palabra idiot en inglés y verá qué le sale).
En una semana se peleó con sus aliados de la Otan, insultó a la primera ministra May, de Gran Bretaña, mientras era huésped en el país de ella. Además, llegó con 10 minutos de retraso a su entrevista con la reina de Inglaterra (la reina de la nación que inventó la puntualidad) ¿Qué dijo sobre todo eso? Que son ¡“fake news”!

Yo quiero ver qué pasa ahora que un hombre de verdad llegará a la Presidencia de México. Un hombre maduro y sensato pero firme, no como el actual, que jamás se ha atrevido a decir que México no pagará por el maldito muro. ¿Adónde conducirá todo eso? Recuerde que el hombre solo tiene año y medio en la Presidencia, al mundo le faltan dos años y medio de Trump todavía, ¿qué cosas veremos?