San Pedro Sula, Honduras.
¿Ha notado usted alguna vez que, mientras algunas personas a los ochenta todavía lucen jóvenes, otras parecen viejas a los cuarenta? Es natural y normal que el cuerpo envejezca, pero es una historia completamente diferente el que una persona¨se ponga vieja¨. La diferencia es de actitud, porque así como es su pensamiento en su corazón, así es Él. La persona no tiene que ponerse vieja, a menos que quiera.
No debemos ponernos viejos, porque podemos hacer cosas todos los días de nuestra vida, ser útiles, tener la responsabilidad de ser lo mejor, hacer lo mejor y lucir lo mejor. Hay siete cosas que podemos hacer para mantenernos jóvenes toda la vida.
SIGA APRENDIENDO. No se conforme con lo que ya sabe. Manténgase acumulando conocimientos acerca de cosas valiosas, su trabajo, su salud, retos nuevos, perspectivas diferentes, su familia, etc. Nuestro cuerpo y nuestra mente funcionan mejor cuando estamos activos y sin ansiedad.
SIGA AMANDO. El amor es la fuerza de la vida y como cristianos debemos amarnos los unos a los otros. El amor hace que fluya energía en nuestra vida, las personas que aman siguen siendo jóvenes de espíritu por que tienen ilusiones y entusiasmo. Para seguir siendo joven, enamórese de Dios, ame a los hombres y aprenda a dejar que alguien le ame.
SIGA RIÉNDOSE. ¿Sabía usted que la risa afecta cada célula de nuestro cuerpo? Cuando reímos, nuestro sistema inmunológico es estimulado y también nuestra creatividad. Además, tendemos a ser más abiertos y transparentes. El reír, es decir, tener gozo en el corazón, es de Dios. La risa no está restringida a los jóvenes, nunca debemos ser tan viejos como para no poder reír.
SIGA TRABAJANDO DURO. Debemos ser fructíferos y productivos a pesar de nuestra edad. Puede jubilarse temprano pero dejar de trabajar es empezar a ponerse viejos, es enviar un mensaje al cerebro, ¡Ya se acabó todo! ¿Quiere seguir siendo joven? Entonces, sea útil.
SIGA DEJANDO ATRAS... Su carga emocional. Nos pondremos viejos rápidamente si no aprendemos a dejar atrás el pasado con todos sus sentimientos de pesar, frustraciones y sufrimientos. Debemos centrar nuestra mente en el presente, perdonar a los demás y perdonarnos a nosotros mismos.
SIGA ANHELANDO... cosas mejores. No renuncie a sus sueños, o comenzará a envejecer. No se conforme con metas demasiado pequeñas o fáciles. Sueñe y haga planes en grande. Dios tiene planes maravillosos para cada uno. Usted y Él pueden alcanzar cosas increíbles.
SIGA APOYÁNDOSE... en Dios. Nunca deja de hablar con Dios ni de escuchar su voz. Siga creyendo que puede apoyarse en Él. Ponga su fe en el Señor con todo su corazón y no se apoye en su propia prudencia.
¿Envejecerá su cuerpo? Sí, seguro, pero eso no significa que también tendrá que envejecer de mente, de espíritu o de corazón. MANTÉNGASE JOVEN...
