El ministerio de Salud de Gaza, en manos del movimiento islamista palestino Hamás, reportó este jueves un saldo de 10,812 muertos en los bombardeos israelíes en este enclave desde el inicio de la guerra el 7 de octubre.
Entre los fallecidos hasta la fecha figuran 4,412 niños y 2,918 mujeres, según detalló el ministerio en un balance actualizado. Igualmente hay 26,905 heridos.
Israel prometió “aniquilar a Hamás” en represalia por el ataque en su territorio el 7 de octubre, en el que los combatientes islamistas mataron a 1,400 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a unas 240.
El éxodo de civiles hacia el sur del pequeño territorio palestino se aceleró con la intensificación de los bombardeos y combates terrestres, según observadores de Naciones Unidas.
El jueves, el ejército anunció que la víspera, “tras diez horas de combates” tomó el control de un “importante centro” de Hamás en Jabaliya, un campo de refugiados del norte de Gaza, desde el que “los terroristas se entrenan y llevan a cabo ataques”.
Además, Israel anunció que un bombardeo aéreo mató a un jefe militar de Hamás, Ibrahim Abu-Maghsib.
A los bombardeos practicados desde el ataque de Hamás, Israel le sumó el 27 de octubre una ofensiva terrestre que, según su ejército, le permitió entrar “profundamente” en la ciudad de Gaza. En la operación han muerto ya 34 soldados israelíes.
Según Israel, la ciudad alberga el “centro” de Hamás, escondido en una red de túneles de varios cientos de kilómetros.