La Ceiba, Honduras
Un equipo compuesto por fiscales del Ministerio Público y personal de los juzgados de esta ciudad comenzó un proceso de revisión a la cámaras de seguridad instaladas en distintos puntos.
El propósito es verificar si estos equipos están funcionando y si concuerdan con la calidad que especifica la facturación de compra.
Este proyecto fue inaugurado en 2013, luego que la pasada administración municipal, rectorada por el actual alcalde Carlos Aguilar, aprobara su ejecución a un costo de unos 12,000,000 de lempiras, en un momento en que la violencia se apoderó de La Ceiba.
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Un informe presentado por el Consejo Nacional Anticorrupcíon (CNA) en agosto de 2014 reveló varias irregularidades cometidas en el proceso de compra de cámaras de seguridad adquiridas por la alcaldía de La Ceiba.
Desde entonces, organismos auditores del Estado y entidades operadoras de justicia han comenzado una investigación por separado para verificar estas denuncias hechas por el CNA. Fiscales de la oficina regional del Ministerio Público del litoral atlántico y personal de los juzgados empezó la inspección apoyados por el personal técnico y legal de la comuna ceibeña.
Carlos Castillo, gerente de la Municipalidad, asegura que con la inspección se demostrará que “las cosas se han hecho bien, que el equipo ahí está, y que se encuentra funcionando y que es un patrimonio de la ciudad”.
Agregó que se confirma que el equipo sea de la calidad referida en la facturación y que el mismo tenga un cumplimiento al sistema que se ha comprado”.
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LA PRENSA reveló en noviembre de 2013 que la alcaldía había instalado cámaras falsas, a lo que el alcalde Aguilar salió al paso diciendo que “hay un contrato con la empresa que instaló este sistema, el cual establece la clase de aparatos que se colocarían, 55 cámaras reales y 45 falsas o cazabobos, que se instalaron como instrumentos de disuasión”.
